Más de 500 personas debieron ser evacuadas en la localidad entrerriana de Concordia, como consecuencia de las inundaciones en Brasil y la crecida del río Uruguay. 

Las autoridades locales difundieron un contacto de emergencia y avisaron que “se vienen tres días muy difíciles, en los que se espera un caudal de agua importante”.

Según el último parte emitido por el Área Hidrología de la Comisión Técnica Mixta De Salto Grande, el panorama en Concordia no es alentador ya que el río podría quedar cerca de los 14 metros durante este domingo. Además, se esperan nuevas lluvias para las próximas horas.

Este fin de semana, como consecuencia de las precipitaciones, la costa de la ciudad se vio desbordada. Esta situación, advierten especialistas, podría afectar a otras regiones, ya que la corriente puede llegar al río Iguazú y sus alrededores.

El intendente de Concordia, Francisco Azcué, transmitió “tranquilidad” a la población y pidió “que tengan calma” al asegurar en una entrevista radial que “estamos trabajando en el territorio con todo el Comité de Emergencia y estamos recorriendo los centros de evacuados”. 

En ese sentido, dijo que la situación "está controlada”, aunque recomendó que “seamos cautos”, dado que “las proyecciones a largo plazo pierden certeza e iremos informando día a día”.

A través de los sitios oficiales de la Municipalidad de Concordia, recordó a los ciudadanos y ciudadanas que “ante cualquier emergencia o pedido” se comuniquen con el 103, ya que “se vienen tres días muy difíciles en los que se espera un caudal de agua importante”.

Hasta este sábado, fueron evacuadas un total de 547 personas (159 familias), algunas a domicilios particulares y otras a centros destinados a tal fin. El operativo de evacuación fue un trabajo conjunto entre las distintas áreas de la Municipalidad de Concordia, Fuerzas Armadas, de Seguridad, Bomberos Voluntarios, Vialidad Provincial y entidades intermedias.

Celina, una de las vecinas afectadas del barrio Nebel, dijo que el ingreso de agua a las viviendas es un fenómeno recurrente en la zona. “En los últimos seis meses, esta es la tercera inundación que me afecta porque en noviembre vino una inundación que fue como el primer pico y si bien bajó, casi 10 días después volvieron las crecientes”, contó en diálogo con C5N.

“Mi casa ya tiene agua en el garage. Cuando uno viene a vivir a esta zona lo primero que hace es levantar un poco el terreno para ganarle un poco más de distancia al agua, pero más que eso no se puede hacer”, lamentó.