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ALDACO DECLARO ANTE LOS
DIPUTADOS POR EL AFFAIRE IBM-BANCO NACION El ex director del Nación volvió a cargar las tintas contra el ex ministro. Los diputados del oficialismo estaban exultantes. Por Fernando Almirón
Alfredo Aldaco llegó ayer al anexo de la Cámara de Diputados media hora antes de lo pactado, a las 11.30. Personal del bloque justicialista lo recluyó en una oficina del segundo piso hasta que llegaron los integrantes de la Comisión Especial Investigadora de las Contrataciones del Estado Argentino con IBM --tal como fue bautizada por la Cámara baja-- que acababan de entrevistarse en la sede de los Tribunales Federales de Comodoro Py con el juez que entiende en la causa del fraude informático, Adolfo Bagnasco. Aldaco, que inicialmente debía presentarse el martes pasado, postergó para ayer su testimonio ante los legisladores con cierta complicidad del oficialismo. El oficialismo necesitaba un poco más de tiempo para ajustar su estrategia a fin de optimizar el rédito político que podrían obtener de la oportunidad, en el marco de la batalla que el justicialismo sostiene con Domingo Cavallo. Y el ex funcionario no defraudó las expectativas. En su declaración afirmó que: * Aldo Dadone, ex presidente del Banco Nación y el principal inculpado en el fraude, "recibía instrucciones del ministro (Cavallo), y no hacía nada sin consultarlo". * Cavallo fue quien señaló el sistema "Hogan" a Dadone y le aconsejó contratar a la consultora Deloitte & Touche para que estudie las condiciones del proyecto. Esta consultora cobró ocho millones de dólares por su intervención en el Proyecto Centenario y recomendó como proveedora a la empresa IBM. * Señaló que de los 21 millones de dólares que se pagaron en coimas a través de la empresa fantasma CCR, de Marcelo Cattáneo, Cavallo sólo ha trabajado en el rastreo de cuatro millones. "Tengo que pensar que hay gente que no quiere que se sepa dónde están los otros 17 millones", dijo. * Jorge Cavallo, hermano del ex ministro, "se presentó como proveedor de software de IBM cuando nunca había vendido software". * "Acá hay unos cuantos que somos perejiles y hay más gente que se lleva el dinero". Alfredo Aldaco era uno de los directores del Banco Nación cuando se suscribieron los acuerdos con la empresa IBM para informatizar 525 sucursales de la entidad bancaria en lo que se denominó Proyecto Centenario. Aldaco reconoció ante el juez Adolfo Bagnasco que recibió tres millones de dólares por parte de los contratistas en concepto de "reconocimiento" --según él es un "perejil"-- por su gestión en concretar el negocio. Aldaco embolsó el dinero y lo depositó en una cuenta en Suiza. Ahora dice que está arrepentido. "Aldaco sangra por la herida porque fue Cavallo quien denunció su cuenta en Suiza", asegura el diputado de Acción por la República, Guillermo Francos. "No niega que recibió coimas, y pretende ensuciar con sospechas a Cavallo", respondió el legislador que reclama el lugar vacante que hay en la comisión investigadora que preside el justicialista Manuel Baladrón. Las sospechas no son vanas. Humberto Roggero, cuando hace menos de un mes no se dio lugar al desafuero de Cavallo que pedían tres magistrados en la Comisión de Asuntos Constitucionales, le explicó al presidente Carlos Menem que no había que anticiparse, y le prometió la cabeza del ex ministro. "Yo me hago cargo", asumió el jefe del bloque justicialista que ya comenzó a trabajar contra la credibilidad de Cavallo en lo que sus estrategas consideran el punto débil: los contratos suscriptos por IBM con la DGI. "Vamos a hacer desfilar por la Comisión a todos los vinculados al caso, no pasará una semana sin que alguien sospeche de Cavallo", anuncian en la bancada peronista, seguros de abortar el futuro político del diputado.
EL PJ APOSTO SUS FICHAS AL EX DIRECTOR Por F.A.
El justicialismo preparó para la reunión de ayer un extenso informe sobre la historia de los contratos por los que se pagaron 21 millones de dólares en coimas. En él se señala insistentemente la participación de Domingo Cavallo en la selección de las consultoras que permitieron la incorporación de la empresa IBM en el negocio. Los informes fueron entregados con tiempo a los diputados oficialistas que integran la Comisión e incluso cada uno de ellos fue provisto de un cuestionario con las preguntas que se le deberían hacer a Alfredo Aldaco durante su declaración. También se ocuparon de preparar un escena contundente. Baladrón y Carlos Soria propusieron, apenas comenzó el encuentro, que la declaración de Aldaco sea pública, con presencia de la prensa. Tres canales de televisión (dos de ellos de cable) y dos agencias de noticias ya habían sido advertidos sobre esta posibilidad. Pese al desacuerdo de la oposición, se forzó una votación donde los justicialistas acompañados por la jujeña María Cristina Guzmán impusieron la mayoría. La declaración de Aldaco fue transmitida en vivo y directo. Cuando Domingo Cavallo se enteró, bajó furioso de su despacho dispuesto a irrumpir en la escena. Fue persuadido por sus asesores a metros de la sala donde se desarrollaba la reunión. La apuesta del justicialismo en la exposición de Aldaco fue tal que Roggero faltó a la reunión de gabinete para monitorear desde su despacho-- a través de un televisor de cuatro pantallas-- en el Palacio del Congreso lo que sucedía en el edificio anexo, mientras daba instrucciones a los diputados de su bancada, a través de su celular.
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Alfredo Aldaco no se anduvo con vueltas a la hora de
comprometer a Domingo Cavallo en la secuencia que dio lugar a los contratos informáticos
entre la empresa IBM y el Estado nacional por los que se repartieron 21 millones de
dólares en coimas. Ante los diputados de la comisión investigadora creada especialmente
para el seguimiento del tema, el ex director del Banco Nación aseguró que "Cavallo
estaba al tanto de todo lo que ocurría en la entidad". Señaló que el entonces
presidente del Banco, Aldo Dadone, "no hacía nada sin consultarlo antes con
él". También dijo que "fue Cavallo quien sugirió las ventajas de adoptar el
sistema Hogan" que después dio lugar al fraude informático, y que "habría que
averiguar quién tiene los 17 millones de dólares que faltan detectar" del total del
dinero pagado a funcionarios en concepto de coimas. Mientras en el bloque justicialista no
podían disimular cierto aire triunfal por las declaraciones de Aldaco, que si bien no
agregó nuevos datos a la causa desparramó sospechas sobre el ex ministro, el compañero
de bancada de Cavallo, Guillermo Francos, tildó la sesión de ayer como un "show
montado por el menemismo".