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Federico Storani fue el primero en admitir que el Gobierno se encuentra en alerta ante la posibilidad de que se produjera un atentado terrorista por parte de grupos fundamentalistas islámicos. La advertencia de los servicios de inteligencia extranjeros es general y no hubo ningún aviso puntual sobre la Argentina. De todos modos, Fernando de la Rúa decidió ocuparse personalmente de un tema especialmente sensible. Ayer, el Presidente convocó sorpresivamente a una reunión con los funcionarios encargados de la seguridad. �Estamos poniendo la máxima atención porque, aunque sea de rutina, es un alerta�, dijo De la Rúa luego del encuentro. El conflicto en el sur del Líbano, base de operaciones del Hezbollah, volvió a tensarse hace tres semanas, cuando el Ejército israelí comenzó a realizar una serie de ataques en represalia por la muerte de siete militares de ese país. El miércoles pasado, el gobierno de Israel autorizó al primer ministro, Ehud Barak, a responder a cualquier ataque terrorista sin consultar al gabinete, lo que agravó aún más el cuadro de situación. El miércoles, Storani recibió advertencias de los servicios de Israel y de Estados Unidos, que registraron reuniones �no habituales� de los grupos armados que operan en el sur del Líbano. �La información indica que allí se habría resuelto la posibilidad de realizar atentados en el exterior para llamar la atención sobre la situación del Medio Oriente�, aseguró el ministro del Interior el miércoles por la noche. Storani subrayó en todo momento que el alerta era general y que no había ninguna información de que se planeara realizar un tercer atentado en la Argentina. Sin embargo, De la Rúa, que suele tomar la iniciativa cuando considera que los temas son críticos, convocó de urgencia a una reunión con los funcionarios de seguridad. A las dos de la tarde se encontraron en la sede de la secretaría el jefe de la Side, Fernando de Santibañes, el ministro de Justicia, Ricardo Gil Lavedra, el secretario de Seguridad, Enrique Mathov, el jefe de la Policía Federal, Rubén Santos, el de la Gendarmería, Hugo Miranda, y el de Prefectura, Juan José Beltritti. El encuentro duró apenas veinte minutos. Los funcionarios informaron al Presidente que, luego del aviso de los servicios extranjeros, se reforzaron los controles de inteligencia sin que se registrara hasta el momento ningún movimiento extraño en la Argentina. Storani comentó que los rastreos realizados por la Policía Federal en las zonas más sensibles, como las Tres Fronteras, no detectaron nada fuera de lugar. Finalmente, De la Rúa se puso al tanto de las medidas preventivas que se pusieron en marcha: un llamado de atención a las policías provinciales para que extremen los controles y un refuerzo de los efectivos de la Policía Federal, la Gerdarmería y la Prefectura encargados de vigilar los edificios de la comunidad judía. A diferencia de las reuniones de gabinete, en la que los ministros suelen hacer de voceros, esta vez fue De la Rúa quien se encargó de aclarar la situación. �Fue una reunión de rutina y no es nada grave. Lo que recibió el Ministerio de Interior fue un llamado de atención�, señaló el Presidente. Y añadió que, de todas formas, solicitó a los funcionarios que pongan �la máxima atención� en el tema. Storani comparó la situación con la que se produjo a fines del año pasado, cuando se reforzaron las medidas de seguridad ante el riesgo de un tercer atentado. �No hay ningún tipo de información fehaciente y concreta que haga presumir la inminencia� de un ataque terrorista en la Argentina, explicó el ministro, y dijo que no existen razones para �la gente entre en pánico�.
LA CANDIDATURA DE FELGUERAS, CONVERSADA EN OLIVOS Por F. C. El quincho de la quinta de Olivos estaba repleto de dirigentes dando cuenta del asado con el que los agasajó Fernando de la Rúa. En una mesa apartada, de a poco, se fue juntando un grupo selecto de personas que hasta hace poco se miraba torcido, pero la convivencia en el Gobierno y la cercanía de la crucial elección porteña los terminó acercando: Carlos �Chacho� Alvarez, Enrique �Coti� Nosiglia, Aníbal Ibarra, Antonio de la Rúa, Darío Alessandro, Rafael Pascual y Cecilia Felgueras. Aunque los testimonios coincidieron en marcar que no se trató ningún tema formal, las bromas sobre la candidatura a vicejefa de gobierno de Felgueras fueron la constante. �Y ella en ningún momento dijo que no quería�, aseguró uno de los presentes que se enrola entre los que quieren que ella acepte.
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