El jefe de Gabinete Marcos Peña presentó su informe de gestión ante el Senado y renovó sus repetidas promesas de una recuperación económica para este año. "Vemos ahora un 2017 en donde estamos convencidos que la Argentina va a crecer", dijo el funcionario, quien auguró que el país "va a salir de esta situación de estancamiento".

Mientras Peña reiteraba sus pronósticos y destacaba que en enero el Indec midió una suba del 1,1 por ciento en la actividad económica, el organismo oficial informó que en febrero ese rubro volvió a la tendencia negativa y cayó 2,2 por ciento en forma interanual. El Estimador Mensual de Actividad Económica mostró también una caída de 1,9 por ciento en febrero respecto a enero.

Ya el Indec había derrumbado las metas oficiales de inflación a mediados de mes, cuando informó que los precios subieron 2,4 por ciento en marzo. "Estamos convencidos que en los próximos meses se va a notar la fuerte baja de inflación que va a ayudar a consolidar el camino de crecimiento", insistió igualmente el jefe de Gabinete. También ratificó que se cumplirá la meta inflacionaria del 17 por ciento en el año fijada por el Banco Central.

En su informe ante el Senado, Peña aceptó que "hay sectores productivos con más complicaciones que otros, como las pymes". Y justificó: "Sabíamos que la transición económica iba a llevar a una etapa más compleja y compartimos la preocupación". Sostuvo que el mayor desafío del Gobierno de Mauricio Macri para los próximos meses es la reducción del déficit fiscal y reclamó "separar la paja del trigo" al advertir que los cierres de empresas y despidos no son todos "por razones macroeconómicas” sino que hay “casos de mala praxis empresarial".

Antes de las preguntas de los senadores sobre la situación económica del país, Peña dedicó su exposición de media hora a la política exterior de la alianza Cambiemos y afirmó que ocupar la presidencia del G20 desde 2018 será "el desafío más importante de la  política exterior en nuestra historia".  También se refirió a la crisis en Venezuela: advirtió que ese país vive un clima de "alta irregularidad institucional y de violación de los derechos humanos" y pidió que el tema se debata en el Congreso.