“Nosotras crecimos sin referentes lésbicos y yo estuve expuesta a la heterosexualidad obligatoria casi 18 años”, dice una de las integrantes de la banda chilena Horregias en una entrevista de radio que registra el documental Amplificadas. Una película dirigida por Sonia Bertotti y Verónica Facchini donde se muestran dos experiencias transfeministas que, sin pedirle permiso a las normas, se meten en el mundo del rock, históricamente protagonizado por varones. Se trata de los festivales Dilda y la colonia de rock Chicas Amplificadas.

La Dilda - Dominga feminista, tuvo lugar entre 2016 y 2020 en el bar Ladran Sancho del barrio de Almagro. Un festival organizado por Flor Mazzone y Eme Romero, orientado a la música ejecutada por mujeres cis, lesbianas, travestis, personas trans y no binarias. Por su escenario pasaron más de 200 bandas y solistas de todo el país, organizadas para crear un espacio de resistencia en la música. DILDA como táctica de liberación del deseo no heteronormado.

Sonia asistió a uno de esos festivales que se daban los domingos y quedó tan entusiasmada que le propuso a Verónica registrar de forma audiovisual lo que sucedía. Fue una de esas noches cuando Sonia conoció al grupo mendocino Las Ex, una de las bandas que participan del documental: "Realmente me atravesó mucho la imagen de las chicas tocando y ese universo. Lo interesante de toda esa experiencia fue que vimos lo que hace el feminismo, que es generar redes, en un momento en el que salíamos mucho a la calle. Me acuerdo que todas las semanas salíamos a filmar marchas, manifestaciones y encuentros", cuenta Sonia.

Lucy Patané tocando en vivo en Dilda

Mientras las realizadoras audiovisuales registraban la Dilda conocieron cientos de bandas, entre ellas, Paltax que ya se encontraban trabajando en el proyecto Chicas Amplificadas, una colonia de rock para niñeces y adolescencias. Fue en ese momento cuando surgió la idea de sumar una segunda experiencia al documental que, en sintonía con Dilda, proponía un espacio de empoderamiento transfeminista para que las más chicas puedan acceder a una primera experiencia de rock, muchas veces vetada para ellas.

La colonia Chicas Amplificadas no es solo una escuela de rock para chicas y chiques de siete a 17 años. Además de reunir a docentes de música que enseñan a lxs pibxs a cantar y tocar instrumentos, dictan talleres de ESI, autodefensa y serigrafía, con el horizonte puesto en la autogestión y el trabajo colectivo. Es un proyecto social sin fines de lucro, integrado por músicxs, artistas, entrenadorxs y educadorxs comprometidxs con la música, la educación y las acciones para lograr la equidad de género y la igualdad social.

"Nos vimos muy involucradas con este proyecto, empezamos a filmarlo desde la primera colonia, ya se hicieron tres y hoy ya somos parte. Como docentes, Verónica y yo creemos mucho en la educación en todos sus aspectos, tanto en la educación formal como en la no formal. Nos dimos cuenta que la colonia estaba muy relacionada con lo que estábamos viviendo en ese momento que era la manifestación del feminismo en las calles", explica Sonia.

La esperanza en las nuevas generaciones

El objetivo de la colonia es empoderar a chicas y chiques a través de la música, para fortalecer su autoestima, generar lazos de solidaridad, impulsar su protagonismo, promover el pensamiento crítico y fomentar la creación colectiva. Les docentes ponen énfasis en la inclusión social y el respeto por la diversidad. La colonia de Chicas Amplificadas forma parte de una red regional de proyectos similares en Brasil, Paraguay y Perú y además integra la Girls Rock Camp Alliance, una red internacional de campamentos de todo el mundo.

Las imágenes de las pibas riendo mientras diseñan los flyers de su propia banda, aprenden a tocar, componen sus propias canciones y se emocionan al subirse por primera vez a un escenario, hablan de una experiencia que nunca olvidarán y que les abre un camino de lo posible, cuando las generaciones que las antecedieron tuvieron que luchar para poder ocupar los espacios de rock históricamente masculinizados.

"Lo que queremos reflejar en la peli es que nosotras entrevistamos y seguimos a varias bandas que tuvieron que pelearla mucho por el espacio, por solo el hecho de ser mujer, lesbiana, trans o travesti. Chicas Amplificadas viene contar la historia de otra manera o a darles el espacio que nuestra generación no tuvo, te muestran que podes tener una banda, que es muy fácil como lo es para cualquier chabón y no importa si estas chicas, chiques realmente hacen una banda, sino que creo que es una forma de empoderamiento, que sepan que pueden hacer cualquier cosa en su vida y que nada las traba. La película muestra un paralelismo entre las adultas, les adultes, las niñas y el cambio generacional, cambio que las niñas y niñes de las nuevas generaciones ya pueden ver por la lucha de las generaciones contemporáneas y de estas mujeres, lesbianas y trans que tuvieron que hacer ese camino al andar. Son músicas que armaron redes que hacen que el mundo sea más fácil y un poco mejor. Todas las personas que hacemos el documental creemos en la educación y que la única forma de hacer un mundo más justo e inclusivo, es a partir de la educación y sobre todo de las nuevas generaciones, de las infancias y de las adolescencias", asegura Sonia.

Sasha Sathya tocando en vivo en Dilda

El documental cuenta con la participación de la música y productora Barbi Recanati, la activista, socióloga y cantante de rap guatemalteca Rebeca Lane, las bandas locales Ibiza Pareo, Lucy Patané, Las Ex, Sasha Sathya, Las Paltax y Las Horregias de Chile.

En el proceso de producción del documental las realizadoras notaron que lo que mantiene vivo a espacios como Dilda y el campamento son las redes que se generan entre las personas que los hacen y se transforman en lugares de contención. “Cuando nosotras empezamos a hacer la película, filmamos un montón de cosas, teníamos material para hacer siete películas y realmente en ese momento no era tan común como ahora encontrar un lugar donde hay un montón de mujeres, lesbianas y trans en un line up, era muy complejo el tema de los espacios para que las mujeres, las lesbianas, las travestis, les trans puedan tocar en un espacio muy tomado por el mundo heterosexual y de varones cis. El documental lo que intenta narrar y contar son esas redes que están relacionadas, esta cosa de unión y que es el eslogan de Chicas Amplificadas que es ‘juntes es mejor’ en el sentido de que todo eso se puede lograr solo de manera colectiva y que la forma en la que podemos relacionarnos y crecer es de manera autogestiva y colectiva."

Amplificadas fue realizada por el colectivo LOBA manada audiovisual, un grupo autogestivo de lesbianas y mujeres que gestionan producciones audiovisuales poniendo el foco en la participación de identidades feminizadas: "Lo pensamos desde una posición política porque sabemos que el patriarcado atraviesa todos los espacios y el mundo audiovisual siempre estuvo ocupado por hombres. Intentamos allanar ese camino, torcer un poco la balanza y a su vez también, porque nos sentimos más cómodas trabajando entre nosotras y nosotres."

Amplificadas se proyectará en la décima edición del Festival Asterisco el próximo viernes 27 de octubre a las 18 en el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (MALBA) Av. Pres. Figueroa Alcorta 3415, CABA.