En un acto en la Universidad de Rosario con la presencia del titular de la Corte Suprema y del Consejo de la Magistratura, Horacio Rosatti; y los ministros de Justicia, Cúneo Libarona; y de Seguridad, Patricia Bullrich se puso en marcha este lunes el sistema acusatorio en Rosario, como una política para enfrentar el narcotráfico. Sin embargo, el primer caso informado por el Ministerio Público Fiscal bajo este sistema  es una investigación contra dos hombres acusados de haber comprado con dólares falsos siete ovejas en la localidad de Arroyo Aguiar.

La investigación se abrió luego de una llamada al 911. El denunciante explicó que había vendido 7 ovejas por 2000 dólares, pero advirtió luego de la transacción que era falsos. Los delincuentes: tres hombres que se movilizaban en un auto rojo con un carro. La intervención quedó a cargo del Área de Atención Inicial y Casos Sencillos de la Unidad Fiscal Santa Fe, encabezada por el fiscal federal Jorge Gustavo Onel.

Con la puesta en marcha del sistema acusatorio en Rosario y su área de influencia --Santa Fe, San Nicolás de los Arroyos, Rafaela y Venado Tuerto--, quedó removida la facultad de investigación que, hasta ahora, estaba en manos los jueces de instrucción. Tras la denuncia, policías de la comisaría Distrito 21 de Arroyo Aguiar detuvo el vehículo denunciado en la intersección de las rutas 11 y 2. 

Los timadores de ovejas eran dos hombres, de 20 y 31 años, junto con un adolescente, menor de edad. El fiscal federal Onel ordenó la identificación de los mayores de edad y el secuestro de los 2000 dólares y de sus teléfonos celulares, para investigarlos por la comisión del delito de expendio de moneda falsa (artículo 283 del Código Penal).  

La causa continuará bajo la instrucción del Área de Casos Sencillos, a cargo del fiscal penal Ignacio Páez de la Torre y del fiscal coadyuvante Eduardo Costa Calvo, quienes  solicitaron un peritaje sobre los billetes incautados. 

"Ante al problema del crimen organizado, haciendo foco en Rosario y su zona de influencia, dijimos que la indiferencia no era neutralidad sino que era complicidad y que nosotros queríamos saber de qué lado estaba cada uno", sostuvo Rosatti en el acto de ayer en la Universidad de Rosario y aseguró que "era mucho lo que había por hacer, pero teníamos claro que una de las herramientas a llevar adelante para mejorar el estado de cosas era la aplicación del sistema acusatorio, que estaba jurídicamente vigente, pero no se aplicaba en la práctica". 

Por su parte, el ministro de Justicia valoró la puesta en marcha del sistema acusatorio para "brindar el mejor servicio a la comunidad, mediante la oralidad, la inmediación, la celeridad y el principio de oportunidad para tener juicios orales rápidos, eficaces, con tiempos más limitados".

El Sistema Acusatorio, cuya implementación fue dispuesta por la Ley 27.150,  sancionada en junio de  2015, pone la carga de la investigación en la cabeza del Ministerio Público Fiscal y brinda a los fiscales las herramientas necesarias para llevar a cabo investigaciones complejas contra la criminalidad organizada. 

Para la puesta en marcha del sistema, el procurador Ricardo Casal nombró como coordinador de la nueva estructura acusatoria al fiscal Fernando Arrigó, quien tomará decisiones sobre los criterios específicos de persecución penal. En el área de delitos complejos estarán los fiscales Javier Arzubi Calvo, Federico Reynares Solari y Matías Scilabra. La fiscal Adriana Saccone será asignada a Atención Inicial y casos sencillos. Martín Suárez Faisal será fiscal revisor y de salidas alternativas. Por último, en el sistema transicional, que administra las causas del sistema que expira hasta tanto concluyan, quedará el fiscal Claudio Kishimoto.

El sistema le da la conducción de la investigación a los fiscales, pero los jueces y juezas de garantías son los que avalan la continuidad de las causas y conceden o deniegan medidas de investigación. Como informó RosarioI12, en la ciudad santafecina asediada por el narcotráfico habrá tres magistrados con esa tarea: Carlos Vera Barros, Marcelo Bailaque y Eduardo Rodrígues da Cruz.

Bailaque y Vera Barros son los únicos jueces federales de instrucción de Rosario. Recurrentemente reciben cuestionamientos porque son el primer eslabón de la Justicia federal en una ciudad donde la narcocriminalidad creció a sus anchas. Las dos bandas principales, además enemigas, Los Monos y la de Alvarado, recién fueron enjuiciadas y condenadas por delitos de narcotráfico una vez que la Justicia provincial los detuvo y condenó por delitos de jurisdicción provincial. Mientras tanto no pasaron por los juzgados de instrucción de Rosario.