La decisión del gobierno nacional de recortar un 30 por ciento del servicio del Tren Roca provocó un verdadero caos en la cotidianeidad de los trabajadores y las trabajadoras que a diario utilizan ese ramal para viajar a sus trabajos. El drama se suma a las demoras y cancelaciones que -extrañamente- hubo durante las últimas semanas en distintos ramales que están bajo la órbita de Trenes Argentinos.

Durante toda la mañana, la reducción de las frecuencias del Roca dejó como saldo andenes abarrotados al borde de provocar accidentes con caídas a las vías, vagones saturados al punto de dificultar el cierre de puertas, robos, pasajeros descompuestos por la presión de los apretujones, continuas demoras y llegadas tarde a los trabajos.

La Secretaría de Transporte informó que los recortes se deben al inicio de obras de mantenimiento en el barrio de Barracas, en los alrededores de la estación Irigoyen. Y con la lógica del que avisa no traiciona, adelantó que esas tareas durarán al menos tres semanas.

Colectivos para suplantar los trenes

Para paliar el caos que esto implicará en las horas pico (trenes repletos, demoras e imposibilidad para viajar), Trenes Argentinos contrató colectivos de diversas líneas para que hagan un trayecto de estación a estación, y así descomprimir las vías.

“Se pondrá a disposición colectivos para el recorrido Plaza Constitución – Temperley con paradas en Lanús, Banfield y Lomas de Zamora. Horarios: 6 a 10 y de 14 a 20", según se informó.

Las paradas fueron ubicadas a 100 metros de las principales estaciones, pero aun así los usuarios esperan varios minutos haciendo filas con la consecuente pérdida de tiempo de viaje hacia sus trabajos. Y ni que hablar de los que quedan en los andenes sin saber nada debido a la falta de comunicación de esos transportes complementarios.

Los pasajeros se enteran de las demoras y de los colectivos de socorro una vez que están en las estaciones, que pagaron el boleto y esperan en los andenes o a través de comentarios en redes sociales. La empresa no informó masiva ni eficazmente sobre estos traumas.

Lo poco que se avisó fue que "los ramales La Plata y Bosques vía Quilmes tendrán una frecuencia de 40 minutos y entre Plaza Constitución y Berazategui de 20 minutos".

En tanto, "los ramales Ezeiza, Alejandro Korn y Bosques vía Temperley tendrán una frecuencia de 20 minutos y entre Plaza Constitución y Temperley de 10 minutos". Pero en la realidad, esos horarios y frecuencias son otra cosa.

Desde temprano hubo personas que esperaron durante media hora en los andenes. Esto sin sumar los trenes colapsados que debieron dejar pasar ante la imposibilidad de subir.