EL PAíS
El Napia Moreno
Por H. V.
Guillermo Moreno, a quien sus amigos llaman El Napia, organizó una agrupación denominada Guardianes de la Democracia, que aspira a representar al kirchnerismo en la Capital. Antes, tuvo la unidad básica “Los hijos de Fierro” y militó en la línea interna del ex jefe de la SIDE, Miguel Angel Toma. Moreno se define como un peronista tan ortodoxo que no le hace asco ni siquiera al reclutamiento de los ex concejales Raúl Padró y Juan Carlos Suardi, prohombres de las prácticas que extinguieron al partido Justicialista en la Capital. El bastonero de los Guardianes de la Democracia, que se identifican con camisetas y pecheras azules que los hacen parecer una murga, es el puntero de Villa Lugano Roberto Olazagasti, quien en las pasadas elecciones de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires fue el 47º candidato a legislador en la lista encabezada por Maurizio Macri. El nombre de la agrupación dio lugar a que se lo asociara con la antigua organización de cuadros Guardia de Hierro. Quienes mejor lo conocen afirman que en realidad su militancia ocurrió en los últimos tramos de la Juventud Universitaria Peronista de la Facultad de Ciencias Económicas, donde se graduó. Moreno integró el gabinete del ex Intendente porteño Carlos Grosso, donde su relación más estrecha era con Kelly Olmos, en el área de microemprendimientos y empleo. Llegó a De Vido a través de Eduardo Curia, un economista de vinculación histórica con José Luis Manzano y Eduardo Bauzá, y autor del primer plan de flexibilidad laboral de Menem, junto con el asesor de la UIA Daniel Funes de Rioja. De trato prepotente, suele recibir en su despacho con un arma de fuego sobre el escritorio.