Viernes, 27 de febrero de 2015 | Hoy
A LA HOGUERA
Se deshace de lo que detesta
Por Gisela Manusovich *
Quemaría en la hoguera el culto a la “mami relajada”. ¿Qué pasa con las que no lo somos? ¿Queremos menos a nuestrxs hijxs? ¿Debemos padecer el señalamiento constante e inquisidor de todo Palermo cool?
Fulanita tuvo su primer bebé. Después de toda la data de rigor sobre el bebé y el parto viene el carnet de pertenencia al club de las madres relajadas que salvarán al mundo. ¿Ella? ¡Relajada! Punto. Suficiente. Ya entró. Fulanita fue aprobada.
¿Qué pasa con nosotras? ¿Qué hacemos sin el carnet? Vamos yirando de reunión en reunión, de cumple en cumple, de calle en calle, gritando, llorando, tensas, abatidas, y por si fuera poco todo el autocastigo, viene el de afuera. La frase. La estúpida y siempre inoportuna frase que invariablemente te hace sentir Violencia Rivas: “Tranquila, tenés que relajarte, él se pone así porque vos estás nerviosa”.
Bueno, listo, llegó Sri Sri Ravi Shankar y en una sola frase me muestra que el mundo y la vida es mucho más simple y luminosa de lo que mis nervios me dejan percibir.
A la relajada nunca le llora el pibe; y si lo hace, hay tres motivos: hambre, está meado o cagado, sueño. En mi caso, después de un buen rato de estar llorando y tras haber comprobado que no tiene ninguno de los tres motivos que lo habilitarían ser un bebé de mami relajada, viene desde afuera el “¿por qué llora?”. ¿Vos me viste cara de traductora oficial? Porque sí, porque es un bebé que llora, sin ningún motivo, razón o circunstancia... ¡llora! Y ahí llega toda clase de sugerencias con esa vocecita naturalmente yoguística que a mí me perfora los tímpanos. El tono de la mami relajada es siempre bajo o monocorde, nada la altera, nada la perturba.
Armemos el club de las madres alteradas, chillonas. Madres desordenadas por el estruendo de un amor alucinante y conmovedor.
* Licenciada y profesora en Artes (UBA). Dicta el curso “Análisis del film”. Info e inscripciones:[email protected]
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.