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Jueves, 16 de febrero de 2012

BLUE ÖYSTER CULT

“Soy adicto a los videojuegos”

Aunque son poco conocidos en el país, después de cuatro décadas tocando se puede pensar que quizá los BÖC
sí sean unos aliens, que han logrado dominar el mundo del rock con más de 15 millones de discos vendidos.

Blue Öyster Cult es un invento. Hace 40 años, después de haber intentado con otros nombres, un grupo de músicos entre los que ya estaban Eric Bloom, y Buck Dharma Roesler, decidió aceptar la sugerencia de Sandy Pearlman, y pasar a llamarse Blue Öyster Cult. Escritor, manager y también crítico de rock, suele adjudicársele la utilización del término heavy metal, tomado a su vez de la obra de William Burroghs, para un cierto tipo de música que por entonces empezaba a surgir. Sandy tenía veleidades poéticas y los Blue Öyster Cult originalmente parece que eran unos aliens reunidos en secreto con la idea de dominar la historia del mundo. A pesar de ser bastante desconocidos en el país, después de cuatro décadas tocando se puede pensar que quizá los BÖC sí sean unos aliens, y que de alguna manera sutil, han logrado dominar, por lo menos, la historia del mundo del rock, con más de 15 millones de discos vendidos y clásicos como (Don’t Fear) The Reaper, Burnin’ for You, Then Came the Last Days of May, Dominance and Submission o Astronomy.

La influencia de Blue Öyster Cult (BÖC) es incalculable y no sólo por sus sonido metalero y por su imaginario esotérico o pseudo esotérico: la música BÖC es una mezcla de buenas melodías pop (por momentos suenan casi A.O.R), virtuosismo instrumental (las guitarras de Buck Dharma son unan cosa seria) y del mejor hard rock, todo matizado con algunas zapadas y pasajes instrumentales bastante psicodélicos que seguramente fascinarán a los seguidores del rock stoner. BÖC es una banda de rock clásico integrada por gente culta e inteligente que supo rodearse de talentosos colaboradores para que su maestría musical tuviera también una poética potente: además de Pearlman colaboraron con Patti Smith (I’m On The Lamb, Baby Ice Dog, Career of Evil o The Revenge of Vera Gemini), con el novelista de ciencia ficción Michel Moorcock y con Jim Carrol (el de los Basketball Diaries), entre otros.

Durante la charla, Bloom mencionará la participación en el último disco de John Shirley, conocido por ser el guionista de la película The Crow. La visita de BÖC al país es una grata sorpresa y genera también cierta intriga: ¿cómo hicieron para mantenerse cuatro décadas tocando juntos? “No hay ningún secreto”, asegura Eric Bloom desde Long Island. La verdad es que nos llevamos bien entre nosotros. Lo mismo con Allen Lanier (ex novio de Oatti Smith que dejó de tocar en vivo pero sigue colaborando con la banda). Sinceramente, yo creo que una de las razones por las que seguimos tocando juntos es porque lo que hacemos nosotros no lo hace nadie”, dice el líder de esta banda esencial en la historia del rock pero que es prácticamente desconocida en nuestro país, al que es la primera vez que vienen. “Es nuestra primera gira sudamericana, la verdad es que no tengo idea de quién puede llegar a ir a vernos y tampoco sé demasiado sobre Argentina”, se sincera Bloom, por lo que quizá zafemos de que salga con la camiseta de la selección y grite “Maradona” como se sienten obligados a hacer tantos artistas cuando vienen de visita al país.

Como sea, el show de BÖC en vivo (cuya formación se completa con capos como Rudy Sarzo en el bajo, Jules Radino en la bata y Richie Castellano en los teclados) siempre fue una cosa seria (por algo ya editaron 5 discos en vivo). En palabras de Eric: “Yo creo que efectivamente los tours nos mantienen unidos: saber que hay tanta gente que está esperando nuestros shows es algo que te estimula mucho. Y además también nos hacemos nuestros tiempos para estar con nuestras familias y para hacer nuestras cosas: la vida de gira te deja tiempos para vos, porque tocas, pero también viajas mucho: eso es quizá lo único que me molesta un poco, más ahora con la paranoia que hay con los viajes aéreos. Pero es una forma de vida a la que ya estamos acostumbrados”.

Bloom nos cuenta que él y Dharma colaboraron mucho más de lo usual en la composición de Curse of the Hidden Mirror, primer álbum de BÖC grabado 100% de forma digital. De hecho entra en detalles técnicos que demuestran que el hombre (que también es ingeniero acústico) sabe de lo que habla. Y es que aunque hayan vendido 20 millones de discos los Blue Öyster Cult no son Kiss. Y aunque la diéresis del Öyster (que le da un toque wagneriano y misterioso al grupo desde su nombre) fue tomada desde entonces por bandas como Motörhead, Mötley Crue o Queensrÿche, los BÖC son pioneros del género metal pero le escapan con elegancia a muchos de sus clichés o de sus taras más burdas, al punto que se puede decir que su música, más que envejecer bien, se diría que no envejece: sus canciones (versionadas por músicos como Metallica, Minuteman, Smashing Pumpkins, Evanescence, Wilco, Elliot Smith o Fu Manchu y celebradas por iconoclastas como Julian Cope o los Radio Birdman) aún se mantienen en pie.

No es casual que durante años hayan sido considerados como los Black Sabbath americanos, pero la verdad es que los BÖC tienen una personalidad propia. Ahora bien: ¿De dónde sale todo ese imaginario de sus portadas, ese símbolo con la cruz y el gancho ese que apareció en su segundo disco (Tyranny & Mutation, de 1973) que algunos relacionaron con la mitología romana y con Kronos y Saturno y que de algún modo inició las fantasías satanistas relacionadas a la música metalera? “Yo creo que cada banda escribe sobre lo que le gusta. Buck Dharma es fan de la películas de terror. No sé si en tu país pasaba eso, pero acá cuando éramos chicos los sábados había ciclos de cine de terror, cine bizarro que duraba horas enteras. Esa es una gran influencia. Y yo personalmente soy un gran fan de los video juegos: la verdad es que son una adicción para mí. Incluso escribo sobre juegos en revistas especializadas. Cuando tenía 8, 9, 10 años me iba a Coney Island en Brooklyn y me gastaba hasta la última moneda que tenía jugando a los pinball. Los juegos on line me siguen volando la cabeza. En ese sentido no cambie mucho, ¡sólo cambiaron los juegos!”.

* Blue Öyster Cult se presentan en vivo el 25 de febrero a las 19 en The Roxy Live!, Niceto Vega 5542.

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