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El gato se desliza en silencio por la sala del CheLA, donde un par de decenas de personas está escuchando Positions, una minimalista pieza del compositor experimental holandés Martjin Tellinga. El gato se siente bienvenido: tal como explica el texto explicativo “para los implicados” firmado por Tellinga, la pieza invita a escuchar “atentamente todos los sonidos: grandes y pequeños, intencionales y accidentales”, a la vez que alienta a los participantes a “silbar, cantar con la boca cerrada y cambiar de posición”. La obra de este seguidor de las ideas de John Cage, Yoko Ono, Luigi Nono, Dick Raaijmakers y Iannus Xenakis abunda en momentos de silencio total, así que mientras el gato ronronea entre las piernas de una de las asistentes, la obra se enriquece con el azar positivo de los sutiles sonidos felinos.

Hace ya dos años que Luciano Azzigotti (compositor y docente con experiencia en colectivos artísticos de impronta social) y Fernando Manassero (compositor, docente y ex integrante de los cordobeses Nina y de Simja Dujov) crearon ConDit (Conciertos en el Distrito Tecnológico de Buenos Aires), un ciclo de recitales experimentales emplazado en el CheLA, Centro Hipermediático Experimental Latinoamericano. Desde hace 10 años, este proyecto dirigido por el científico de la UCLA, Fabián Wagmister, demuestra todo lo que se puede lograr desde la autogestión.

Instalado en una ex fábrica de amianto de Parque Patricios, el proyecto hace convivir a Circo Social (proyecto que lleva dos generaciones de egresados de la villa cercana), AnimateCheLA (creación audiovisual), A77 (arquitectura nómade que actualmente exhibe su obra en el MoMA, el Museo de Arte Moderno de Nueva York) y Los Meteoritos (grupo de ayuda escolar). La unión hace la fuerza, y en este variopinto contexto fabril el ConDiT nació con la humilde pretensión de brindar una alternativa a los conciertos de corte académico.

No es casual que el poeta Ricardo Cabral esté a cargo de la comunicación del ConDiT: todas sus actividades funcionan como una plataforma dedicada a la música como acto poético: performances, instalaciones, intervenciones sonoras experimentales. “Ahora con la visita de Martjin Tellinga se abre un espacio de residencias. Tellinga empezó la temporada reinterpretando la performance Ping Pong de Dick Raaijmakers junto a dos tenistas de mesa federadas jugando con micrófonos piezoeléctricos de contacto dispuestos en la mesa y en las paletas.”

Cabral destaca la tarea de Azzigotti y Manassero que, “además de ser curadores y productores artísticos, también hacen las veces de técnicos, plomos y ocasionalmente instrumentistas”. Conjugando investigación artística y científica, y con la idea de que no sólo asistan entendidos, el ConDiT funciona y se expande: “Las actividades del CheLa ayudan a que la gente se acerque: está bueno que haya más de cien personas en una performance experimental. Sólo basta un poco de curiosidad por lo desconocido y la disposición para probar una experiencia no sólo auditiva con el sonido sino también física y amable con el entorno”.

* El sábado 25, la cornista francesa Delphine Gauthier-Guide y el violonchelista argentino Martín Devoto actuarán en el CheLA, Iguazú 451, Parque Patricios. Gratis.