Bajo la consigna "Entre el malestar y la innovación. Los nuevos retos para la democracia en América Latina", investigadores e intelectuales del ámbito de las Ciencias Sociales de nuestro país y el exterior, funcionarios públicos de distintos niveles, legisladores, realizadores audiovisuales y periodistas, participarán del 8 al 11 de setiembre del XI Congreso Nacional y IV Internacional sobre Democracia que organiza la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional de Rosario (UNR). El Congreso, instalado desde hace 20 años como un encuentro académico y político relevante, contará con paneles especiales, conferencias, presentaciones de libros, mesas redondas, mesas de ponencias libres en distintas áreas temáticas, y muestras artísticas. "Nos pareció interesante rescatar este año en la discusión sobre democracia, la tensión y los contrastes que hay en América Latina entre un conjunto de experimentos democráticos que son de gran atención para el resto del mundo", destacó Cintia Pinillos, secretaria de Planificación y Gestión de la Facultad.

Este año confirmaron su presencia en el Congreso, que se realiza cada dos años, Marcelo Cavarozzi, Manuel Garretón, Oscar Oszlak, Waldo Ansaldi, Isidoro Cheresky, Cesar Tcach, Francisco Delich, Carlos de la Torre, Hugo Quiroga, y Manuel Mora Araujo, e investigadores e intelectuales de Francia, España, Estados Unidos, Colombia, Brasil, Chile, Uruguay, Venezuela, Perú, Costa Rica, Ecuador, Bolivia y Paraguay.

"A nivel regional, el Congreso ha convertido a la Facultad en un espacio de referencia ineludible para discutir estos temas. Es más importante aún porque empezó como una experiencia muy precaria, entre un grupo de estudiantes y docentes, y hoy es un evento que la comunidad de la Facultad se lo apropió completamente", señaló el decano de Ciencia Política, Franco Bartolacci. "Cumplir 20 años en actividades académicas de este tipo no es un dato que se reitere en el ámbito de las ciencias sociales", agregó Bartolacci.

Respecto a la consigna del Congreso que comienza el próximo lunes, Pinillos señaló que "por un lado, América Latina es un laboratorio de experiencias de participación que parecen alentar una mirada positiva sobre la ampliación de la democracia. Por otro lado, la región es históricamente el lugar donde la democracia es una experiencia difícil, tortuosa, interrumpida; y donde en muchos casos se ve combinada con altos niveles de desigualdad, probablemente los más altos del mundo".

Según la secretaria de Planificación y Gestión de la Facultad de Ciencia Política, "buena parte de los desafíos que tenemos pendiente en muchos países de América Latina es que necesitan una incorporación mucho más importante de la gente común a la vida pública. Como contrapartida, esa innovación, donde hay mujeres que son presidentas, donde hay ex perseguidos políticos que son presidentes, representantes de pueblos indígenas que son presidentes y que es alentador en ambos sentidos, conviven con altos niveles de desigualdad y de desafección política".

Pinillos consideró que "hay un malestar muy fuerte, con baja de participación histórica en las elecciones, en lo que es la democracia representativa, claramente la experiencia chilena lo representa, gobiernos que no logran terminar sus mandatos, como el caso de Fernando Lugo en Paraguay, juicios políticos, pero por otro lado es el ámbito de la innovación democrática. Esa tensión nos parecía que era central para mirar a América Latina".

"Lo que tratamos de transmitir justamente con ese lema es que la mayor parte de las actividades del Congreso, así lo enfoquen desde la línea internacional, el género (ver aparte), la economía social, puedan mostrar esos contrastes. Los simposios, incluso, trataron de incorporar la consigna del Congreso en sus propios nombres, el lema cruza transversalmente las mesas redondas, las conferencias", agregó Pinillos. Los organizadores del Congreso resaltaron que, por las características de la Facultad, en la que no hay sólo politólogos, sino que hay licenciados en Relaciones Internacionales, comunicadores y trabajadores sociales, está más orientado a las ciencias sociales. "Cuando surgió el Congreso, era una idea de un grupo de estudiantes y docentes. Hoy, toda la Facultad está detrás, con cientos de docentes trabajando como expositores, organizando actividades, contratando muestras, coordinando mesas", indicó Pinillos.

Números. Durante tres días, en el XI Congreso Nacional y IV Internacional sobre Democracia, tendrán lugar más de 250 actividades; 127 conferencistas y expositores invitados; 153 expositores extranjeros; 53 conferencias y paneles especiales; 85 mesas redondas; 25 presentaciones de libros y revistas; 211 ponencias libres y más de 76 ponencias de estudiantes.

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