Sábado, 20 de junio de 2015 | Hoy
UNIVERSIDAD › DESDE 2001, VETERINARIAS TRABAJA EN MEJORAR LA PRODUCCIóN GANADERA
El Servicio de Prótesis Dentales para rumiantes de la Facultad de Veterinarias se abocó hace más de una década a perfeccionar la técnica que modifica las variables de producción en los tambos, al aumentar la vida útil de los animales.
Por Victoria Schmuck*
El Médico Veterinario Adolfo Silveyra dirige actualmente el Servicio de Prótesis Dentales para rumiantes que funciona en la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional de Rosario (UNR). Silveyra se abocó hace unos años a perfeccionar la técnica de dentaduras artificiales en bovinos y ovinos modificando sustancialmente las variables de producción en los tambos. Se trata de una técnica que posibilita el aumento de peso del animal para la venta y mejoras en las variables de producción física y económica del rodeo, lo que permite extender la vida útil 5 años en promedio y evita el anticipado descarte de los vientres. "Las prótesis dentales se presentan hoy en día como una alternativa comprobadamente favorable, económica y no agresiva, dando como resultado numerosas bondades para los criadores comerciales", sostuvo el investigador de la UNR.
El proyecto de Silveyra surge en el año 2001, a partir de la observación empírica en tambos, donde indagó sobre la relación que existía entre el avanzado y disímil desgaste dentario y la consecuente eliminación de los animales reproductores con destino a frigoríficos. Lo hizo entre animales de zonas núcleo ganaderas, de pastizales más tiernos, con respecto a los animales de zonas marginales de cría que presentan suelos arenosos, rocosos, pastos xerófilos, duros, leñosos y aguas duras y saladas.
A partir de la aplicación de la técnica, lograron retener vacas adultas ya probadas y eficientes. "De lo contrario estas excelentes madres, mal llamadas vacas viejas, ya que son vacas adultas con desgaste dentario, en su último año reproductivo serán reemplazadas por terneras de reposición que todavía deben sortear dos grandes obstáculos referentes a su vida reproductiva, como es el primer parto y su segundo servicio, momentos claves donde un alto número de ellas resultan descartadas", mencionó el especialista.
El profesor explicó que no todos los pacientes pueden recibir el tratamiento de prótesis dental y es imprescindible un reconocimiento general para detectar el grado de desgaste dentario o alguna patología no muy frecuente pero probable como la periodontitis. "Pueden recibir dentaduras sólo los pacientes que posean medio diente, de lo contrario la aplicación de la prótesis resultaría poco conveniente", apuntó.
Además, Silveyra señaló que el deterioro de los dientes comienza cuando el ternero o cordero se inicia en la alimentación herbívora: "Como el animal no cuenta con incisivos superiores, los ocho incisivos del maxilar inferior son los encargados de atrapar y arrancar el forraje, trabajando como las cuchillas de la plataforma de una cosechadora, motivo más que suficiente para que los mismos se desgasten cuando cortan pastos duros, leñosos, o sobre suelos arenosos o con aguas duras".
El investigador indicó que crearon una prótesis que reúne todas las características y objetivos que se propusieron alcanzar. "Garantizar una prótesis de larga duración, que no provoque rechazos en la implantación, de rápida colocación y que además sea de bajo costo, aproximadamente entre el 12 y 15 por ciento del valor de una vaca buena", precisó.
El equipo trabajó conjuntamente con el laboratorio del Centro Tecnológico de Plásticos y Elastómeros que funciona en el Instituto Politécnico Superior de la UNR, quienes desarrollaron un cemento realizado con acrílicos de última generación que permitió una fuerte adherencia, resistencia a la compresión y elevada dureza para lograr retención mecánica y química.
Según el especialista, la prótesis tiene la particularidad de ser individual. "La toma de impresiones maxilares numeradas permite la elaboración de una prótesis para cada animal, igual que en humanos, y está confeccionada con metales quirúrgicos altamente calificados, logrando una prótesis que no provoca molestias a la hora de su implantación, y la colocación no dura más de tres minutos". Asimismo, Silveyra subrayó que la relación costo beneficio en número de terneros/corderos, kilos de peso, litros de leche, kilos de lana, hectáreas en producción, y valor de vaquillonas de reposición ahorrados, es de 5,73 pesos por cada peso invertido en este insumo.
El profesor destacó que la prótesis dentaria es de carácter preventivo del desgaste dentario y no reparadora, por lo tanto no se pueden rescatar vacas con excesivo desgaste dentario. "Antes de tener medio diente se debe tomar la decisión de cuáles son los animales superiores que se desean conservar y en los rodeos de cría es de vital importancia aconsejar la aplicación de esta técnica, una vez superados todos los inconvenientes reproductivos y sanitarios", explicó.
La colocación de estas prótesis ofrece múltiples ventajas para los criadores. Por un lado disminuye la cantidad de terneras para la reposición de vientres, por lo tanto hay una mayor cantidad de terneras para la venta. Del mismo modo ha permitido obtener cinco terneros promedio más por cada vientre. "Y en ese sentido, el criador tiene un menor desembolso de dinero al momento de poblar su campo porque disminuye la compra de vientres y recompra sus vacas al 15 por ciento de su valor", detalló el investigador de la UNR.
Silveyra también mencionó que las vacas que se descartan con prótesis, luego de terminar su ciclo reproductivo se encuentran en un excelente estado de gordura y pueden venderse como vaca gorda para el consumo. Y es importante destacar que a partir de la aplicación de esta técnica, "la selección del animal es por fertilidad, dado que existe una mayor presión de selección para el rodeo en las terneras y en las vacas de siete u ocho años a las que se le colocarán las prótesis dentales".
Esta investigación comenzó siendo una observación en tambos y terminó transformándose en una técnica que modifica variables de producción observables de un año para el otro. "La ganadería es fuertemente dependiente de procesos para incrementar su productividad, lleva años desde su aparición hasta su internalización y posterior aplicación por parte del productor y sus empleados debido a causas como el calendario sanitario y el pastoreo rotativo, entre otras. Pero fue un gran aporte y seguiremos avanzando y trabajando en camélidos americanos y en pseudo rumiantes como camellos y dromedarios, los cuales implican un desafío", concluyó Silveyra.
*Integrante de la Dirección de Comunicación de la Ciencia-UNR
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