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La linda y maltratada ciudad de La Plata ya es un verdadero laboratorio en cuestiones patrimoniales. El reciente fallo de la Suprema Corte de la provincia de Buenos Aires ordenando que la Municipalidad local muestre un poco de respeto y seriedad, presentando el plan de manejo que debe desde hace dos a帽os, fue una muestra. Y el reciente esc谩ndalo por los funcionarios que coimeaban para dar permisos de construcci贸n, subdivisi贸n y rezonificaci贸n termina de demostrar que los patrimonialistas tienen raz贸n: la ciudad est谩 siendo destruida para que unos pocos se llenen los bolsillos.
El fiscal de la Unidad Funcional de Instrucci贸n y Juicio 8, Jorge Paolini, est谩 investigando la denuncia de un particular al que le pidieron doscientos mil d贸lares para rezonificarle lotes. El denunciante, Guillermo Andreau, quer铆a subdividir dos terrenos para venderlos a beneficiarios del plan Pro.Cre.Ar, que concede cr茅ditos para construir viviendas en lotes propios. Esto da una idea de la modestia del asunto y deja en claro que no se trata de grandes negocios con torres en zonas premium.
Paolini sorprendi贸 con una serie de allanamientos en el Palacio Municipal y en otras dependencias donde secuestraron grandes cantidades de documentos.
Con los papeles en la mano, el fiscal consider贸 en la causa por exacciones 鈥揺l nombre legal de las coimas鈥 que existe una asociaci贸n il铆cita dedicada al tema. Sus miembros incluyen a Mariano Bruera, que es el hermano del intendente Pablo Bruera, a su secretario de Gesti贸n P煤blica, Enrique Sette, a su director general de Planeamiento y Obras Particulares, Gustavo Petr贸, y a su director de Planeamiento, Roberto Moreno. Adem谩s, est谩n bajo investigaci贸n penal los empleados Ra煤l Moratti y Cristian Ybarra. Esta semana se supo que la pista est谩 trascendiendo al hermano del intendente y al nivel t茅cnico que concede los permisos, para llegar m谩s arriba en la pol铆tica. El secretario general de la Municipalidad, Jorge Campanaro, tambi茅n est谩 siendo investigado en el caso.
La causa arranc贸 con la denuncia de Andreau de que le pidieron 216.000 d贸lares contantes y sonantes para arreglarle los permisos de subdivisi贸n y rezonificaci贸n de sus terrenos en 52 y 161. El fiscal Paolini intervino los tel茅fonos de los funcionarios ahora procesados y de un ex, Ricardo Riddick, que fue director de Planeamiento de la Municipalidad. Seg煤n inform贸 el medio local Infoplatense, Riddick era el nexo en el negocio entre Sette y Moratti. Este 煤ltimo, empleado municipal, era el que hablaba con el denunciante para convencerlo de pagar.
Pero el fiscal avanz贸 m谩s all谩 de comprobar fuertes indicios de coimas y descubri贸 que, igualito que en esta Capital Federal, hab铆a dos cadenas de corrupci贸n compitiendo entre s铆. Seg煤n Paolini, la cadena de Sette compet铆a en forma directa con la de Campanaro, que adem谩s de secretario general del gobierno municipal de Bruera es abogado del principal diario platense, El D铆a. El fiscal escribe que 鈥渄e las escuchas intervenidas surgir铆a tambi茅n la posible comisi贸n de otros delitos de acci贸n p煤blica en los que habr铆an tomado parte otros sujetos de los aqu铆 imputados. Tal es el caso del actual secretario general del municipio, Jorge Campanaro, y el ex director de Planeamiento Ricardo Riddick鈥.
El denunciante Andreau fue a verlo a Campanaro, a quien conoc铆a, para decirle que 鈥渞ealmente no pod铆a creer que estos tipos me estuvieran pidiendo dinero para hacer un tr谩mite administrativo鈥. Seg煤n Infoplatense, la respuesta fue que 鈥渆sto se maneja as铆鈥. Este di谩logo tuvo consecuencias el 6 de mayo pasado, cuando el funcionario Moreno y el empleado Moratti hablan, en una llamada grabada por la fiscal铆a, acerca de que Andreau 鈥渆stuvo golpeando otra puerta鈥.
Para el 28 de mayo, la entrada de Campanaro en escena ten铆a una consecuencia muy concreta, una rebaja en la coima. Ese d铆a, a las 18.05, Moratti le pide a Moreno que 鈥渓e baje la pendiente鈥 al asunto 鈥渆n 114 grados鈥 de modo de cerrar de una vez. Es que 鈥渄e esa forma yo se lo saco del buche al otro, porque el otro iba a ir directo arriba, viste... se lo saco del buche y lo solucionamos nosotros鈥. Esta 煤ltima frase hace que Paolini considere que est谩 confirmado que 鈥渋nterviene al menos otra persona m谩s en el pedido de dinero, que decide por encima de estos dos sujetos. Quien no ser铆a otro que Enrique Sette, m谩ximo responsable de la Secretar铆a de Gesti贸n P煤blica鈥.
El fiscal considera que no hay duda de que esto no fue un caso aislado sino un 鈥減lan delictivo鈥 que se contin煤a en el tiempo. 鈥淟a pluralidad de personas a las que se les solicita o exige dinero, o de las que se reciben propuestas; las distintas caracter铆sticas de los lotes comprendidos en la negociaci贸n; la diferente 鈥榯asaci贸n鈥 de las operaciones; y la planificaci贸n de distintas personas en la solicitud-exigencia de dinero 鈥揚etr贸, Ybarra o Moratti鈥 despejan por completo la hip贸tesis de unidad de conducta delictiva鈥.
El denunciante Andreau fue valiente al hacer su denuncia, que puede comenzar una bola de nieve imprevisible. Si para dos terrenos modestos, destinados al plan de viviendas populares del gobierno nacional, se ped铆an semejantes montos, 驴cu谩nto figura en el tarifario para emprendimientos realmente grandes? Ahora se entiende mejor la dur铆sima voluntad de la Municipalidad de La Plata de mantener abierto al negocio el Casco Fundacional de la ciudad, el Centro, y la arbitrariedad con que se pasaron c贸digos urbanos suicidas...
SOS Caballito insiste en poner un poco de raciocinio en el proyecto de cambio de zonificaci贸n de los terrenos ferroviarios de su barrio. La ONG que se bati贸 tan bien con las torres pide algo realmente duro en esta ciudad gobernada por el macrismo: que se tengan en cuenta las necesidades reales de los vecinos y se haga, una vez en la vida, un plan de uso. Lo hacen porque ya casi no quedan terrenos semejantes en Buenos Aires y no queda ninguno en su centro geogr谩fico, un punto de saturaci贸n extrema.
Caballito es la demostraci贸n por la brutalidad de d贸nde nos lleva la doctrina falluta de la M谩xima Densidad Urbana. Muchos profesionales de la arquitectura y el urbanismo proponen esto con voz engolada y argumentos supuestamente intelectuales o al menos t茅cnicos, pero la realidad los pone en su lugar de voceros de la industria especulativa. La M谩xima Densidad es en concreto la falta de l铆mites para poner una torre al lado de la otra sin sujetarse aunque sea a la ley de Nueva York, donde se paga por la adaptaci贸n de la infraestructura urbana y el aumento de tr谩nsito (estos yanquis, tan socialistas).
Caballito tiene siete kil贸metros cuadrados de superficie donde ya se apilan 180.000 personas, casi el doble que el promedio del resto de la ciudad. En esta d茅cada, le agregaron a este colmenar unos tres millones de metros cuadrados de construcci贸n, lo que hace un metraje por superficie del barrio realmente notable. Sin embargo, la poblaci贸n de Caballito no var铆a de censo en censo, lo que muestra que lo que se construye son estacionamientos de d贸lares y no viviendas. Lo que s铆 se habilita son locales y m谩s locales, lo que consolida la afluencia de tr谩nsito a la zona. La situaci贸n respecto del verde es simplemente calamitosa, ya que el barrio tiene apenas un metro y medio por habitante, concentrados en un par de parques grandes, muy lejos de los diez metros recomendados. Este panorama se extiende hacia el oeste porte帽o, caracterizado por la falta de plazas y la saturaci贸n de transporte p煤blico y de autom贸viles.
Lo que hizo SOS es enviarles una carta abierta a los legisladores porte帽os que tienen que tratar un proyecto de normas especiales oficialmente conocido como el Expediente 2513-J-2013 y agregado antecedente 1604-J-2011. Lo que piden es que se suspenda el tratamiento del proyecto y se averig眉e c贸mo fue que terrenos de propiedad nacional fueron a parar a manos de la constructora IRSA, cosa hasta ahora casi secreta. Si no hay irregularidades en los t铆tulos, los legisladores deber铆an insistir en un parque, d谩ndoles a los privados una compensaci贸n no por medio de una expropiaci贸n sino por un convenio urbano por el que se cambia la obra en Caballito por otra u otras en lugares donde s铆 hagan falta estas inversiones. Ser铆a fresqu铆simo ver que por una vez en la vida la Ciudad no sale perdiendo de uno de estos convenios, que siempre terminan con empresas tomando espacios p煤blicos.
Recuperar los terrenos permitir铆a crear un parque y dar espacio para cierta infraestructura que Caballito necesita mucho m谩s que un shopping y m谩s torres. Por ejemplo, se podr铆an hacer t煤neles o puentes conectores que eviten el absurdo macrista de los puentes en U, rid铆culos bodrios que se proyectan por ejemplo para la calle Federico Garc铆a Lorca. Tambi茅n se podr铆an construir una escuela 鈥搚a que en Caballito tambi茅n faltan aulas鈥, un centro de atenci贸n de salud y un espacio social para gente con necesidades sociales. Y verde, m谩s verde.
Como se ve, esto es usar el escaso espacio disponible en Buenos Aires con racionalidad y no con la l贸gica excluyente del dinero. Adem谩s, estos usos no traer铆an manadas de autos al barrio y solucionar铆an m谩s de un problema a la vez. El PRO anunci贸 recientemente un plan de lo m谩s electoralero para crear m谩s plazas y espacios verdes en la ciudad que malgobierna. Pero se cuid贸 muy mucho de mencionar Caballito. 驴Por qu茅 ser谩?
Y eso que Mauricio Macri se debe haber enterado de que las Naciones Unidas publicaron su nueva gu铆a de megaciudades y que Buenos Aires es una de las cuatro, apenas cuatro por suerte, que tiene Latinoam茅rica. M茅xico, R铆o y San Pablo completan el podio continental de las que tienen m谩s de diez millones de habitantes, con lo que se entiende que al decir 鈥淏uenos Aires鈥 quieren decir el AMBA, el conjunto real de todo el tejido urbano. De paso, la ONU descubri贸 que el proceso de apilamiento urbano aumenta r谩pidamente. En 1990 hab铆a apenas diez megaciudades, con 153.000.000 de personas, hoy hay 28 con 453.000.000. La fuga del campo a la ciudad es un hecho, con el 54 por ciento de los seres humanos viviendo en ciudades.
Un lujo que se da m2 es el de tener a Mat铆as Delfino como una suerte de enviado especial a los mejores eventos de dise帽o gr谩fico del mundo. Con base en Nueva York, Delfino es dise帽ador de las Naciones Unidas y autor de varias campa帽as de inter茅s p煤blico para el organismo internacional. Quien tenga la suerte de andar hasta fines de este mes por Manhattan podr谩 ver una muestra de su trabajo en el Consulado argentino de la calle 56, casi Quinta Avenida. Titulada Making Hope Visual: Designing for the World from de United Nations, la muestra re煤ne im谩genes muy fuertes sobre la paz, la reconciliaci贸n y la vida creadas por Delfino para la ONU.
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