Más de 260.000 mujeres reportaron situaciones de violencia de género entre el 2013 y el 2017. Los datos surgen de un registro de violencia de género abierto y difundido ayer por el Indec. Se denomina Rucvm (Registro Unico de Casos de Violencia contra las Mujeres) y es el primero que habilita datos duros para ser utilizados por políticas de Estado. No incluye femicidios. La data que recibe el Indec llega desde diversos niveles de organismos estatales, de diferentes áreas además (salud, seguridad, justicia, municipal, provincial, nacional), que a su vez reciben la información en forma directa de parte de las propias víctimas de violencia de género, o en forma indirecta, a través de la data recibida en investigaciones. En ningún caso se abren los datos personales de las denunciantes y víctimas. Los recibidos para incorporar al Rucvm, no pueden ser utilizados para hacer proyecciones y calcular cifras totales, ya que no son homogéneos: cada jurisdicción tiene sus particularidades; no todas las jurisdicciones envían data de todos los niveles; hay provincias que aportan más data de municipalidades que otras; las denunciantes tampoco vuelcan información homogénea. Los datos sirven para lo que dicen que son. Su articulación o la información que provea deberá servir para elaborar políticas de Estado. Empezaron reuniendo desde 2013 hasta 2017 inclusive. A partir de ahora, se renovará anualmente.
Entre la información provista, el Rucvm informa que el 71,3 por ciento de los casos de violencia de género corresponden a quienes pidieron asesoramiento, orientación y asistencia en organismos públicos.
Luego están las denuncias judiciales (16,9 por ciento) y, en proporciones menores, las presentaciones policiales y consultas realizadas para la atención de la salud de las víctimas, las que suman estos dos últimos rubros, el 5 por ciento de los casos.
El Rucvm es la primera base de datos que reúne y sistematiza información de registros de organismos oficiales, desde la policía hasta los hospitales, juzgados, en niveles municipales, provinciales y nacional, pero que no da cantidad de víctimas. No es un registro de victimización, sino un corte de las denuncias y los casos tal como llegan a cada agencia estatal, con su lógica disgregación, ya que no se trata de casos en los que la interesada llene una planilla que se repita, como un censo, exactamente igual en todos los distritos de todo el país en todos los niveles. Sino que se trata de denunciantes en situaciones extremas y cuyos datos llegan en situación caótica, y en segundo plano, ya que lo que prima en ese momento es resolver la situación de riesgo de inmediato.
Fueron 260.156 casos los recopilados por el Indec entre el 1º de enero del 2013 y el 31 de diciembre del año pasado, y la mayor parte (71,3 por ciento) corresponde a la búsqueda de asesoramiento, orientación y asistencia por parte de mujeres a partir de los 14 años.
Están las denuncias judiciales (16,9 por ciento) y, en proporciones menores, las presentaciones policiales y consultas realizadas para la atención de la salud de las víctimas, las que suman estos dos últimos rubros, el 5 por ciento de los casos.
El 60,2 por ciento de los casos de violencia corresponden a mujeres de entre 20 y 39 años de edad. Entre 20 y 29 años acumulan el 30,8 y la franja de entre 30 y 39 años el 29,4.
Los casos de mujeres de 14 a 19 años de edad que denunciaron situaciones de violencia son el grupo menos representado en el Rucvm, aunque “hay que tener en cuenta que algunas instituciones sólo reciben denuncias de mujeres de más de 18 años”, aclaró el informe.
La mitad de los casos denunciados (50,4 por ciento) son denuncias de mujeres que tienen un empleo, ya sea formal o informal, lo que expresa de alguna manera “su grado de vulnerabilidad y sus posibilidades económicas para salir de ese contexto de violencia”, detalla el informe.
En el 82,7 por ciento de los casos, el vínculo de la víctima con el agresor es el de pareja (45,8) y ex pareja (36,9). Estos porcentajes se dan en todos los grupos de edad.
En tanto, hay otros vínculos familiares presentes en determinadas edades, como por ejemplo el de padre y madre entre las adolescentes de 14 a 19 años (17,3 por ciento) y los de hijo e hija, entre las mujeres de 50 años y más.
En tanto, en el 76,8 por ciento de los casos la víctima convive con el agresor cuando se trata de una pareja, en un 69,1 cuando es el padre, en el 67,3 en el caso de la madre y en el 66,3 cuando son los hijos.
En el Rucvm se registraron casi todos los tipos de violencia, aunque no se han verificado casos de violencia mediática.
Esos tipos de violencia “no son excluyentes”. Tanto es así que el 70 por ciento de los casos registrados son de mujeres que sufren más de un tipo de violencia en forma simultánea. Predomina la psicológica (86,9 por ciento), seguida de la física (67,4), la simbólica (25,1), la económica y patrimonial (19,4) y la sexual (7,9) y la modalidad más informada es la doméstica (97,0).
Este diario preguntó si los casos de objeción de conciencia aparecían como violencia y la respuesta fue positiva: obstétrica. Pero tienen escasa presencia en el registro: dependen de que el hospital lo informe.