La tenista estadounidense Serena Williams es la única mujer ubicada entre los 100 deportistas mejores pagos del mundo, según Forbes. Serena se ubicó en el puesto 51 durante el año pasado, con 27 millones de dólares en su haber, lejos del delantero portugués de Real Madrid, Cristiano Ronaldo, quien embolsó 93 millones. 

El ejemplo de Williams refleja una de las demandas formuladas antes del Día de la Mujer que se celebrará hoy, cuando se exigirá la ruptura de la brecha salarial entre hombres y mujeres. 

La cuestión del dinero en el deporte se nota principalmente en los premios por un mismo campeonato y también en el patrocinio. El tenis consiguió equiparar el dinero entregado por la consagración en Grand Slams, sea de varones o damas, aunque en el resto de los campeonatos se mantienen esas diferencias. 

La rumana Simona Halep, que en 2017 llegó a número uno del ranking mundial, acumuló en ese ejercicio premios por 5.270.000 dólares, al tiempo que el mejor del mundo, el español Rafael Nadal, se llevó 12.700.000.

Por otro lado, el fútbol es una de las disciplinas con más distancia entre los dos géneros, al punto de que el Mundial femenino de Canadá 2015 otorgó 15 millones de dólares y el masculino de Rusia, a disputarse entre junio y julio próximo, brindará 791 millones.