En la reunión de la Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal, los obispos manifestaron su preocupación por “la delicada situación social que atraviesa el país y por el número creciente de despidos”, por lo que reclamaron asistencia “urgente” para las más de 16 mil familias afectadas por las inundaciones en el noroeste del país. Tras dos días de deliberaciones, los obispos dieron a conocer una declaración donde expresaron también estar “muy preocupados” por el debate abierto en el Congreso para tratar el proyecto de despenalización del aborto.