La Policía Bonaerense detuvo a dos mujeres acusadas de intentar envenenar, dos veces, a un preso con un pesticida para hormigas e intoxicar al agente del Servicio Penitenciario que lo custodiaba. Los dos hombres se encuentran en estado crítico, internados en la terapia intensiva del Hospital Mi Pueblo, de Florencio Varela.
El lunes pasado, al mediodía, la esposa de Emilio Alé, Betania Pérez Pilo, se presentó en la unidad penal 23 de la localidad bonaerense de Florencio Varela junto con su amiga María Alejandra Pérez. Ambas se registraron para visitar al interno, de 46 años; según la versión de los investigadores, su plan era asesinarlo. Por eso mismo, luego de charlar durante varios minutos, Alé se descompuso en el centro de visitas del penal y fue trasladado con un custodio hasta el centro de salud Mi Pueblo.
Hasta ese lugar también llegaron Pérez Pilo y Pérez. Entraron al hospital con dos botellas de gaseosa que les entregaron a los penitenciarios: “La Sprite es para ustedes y la Paso de los Toros pomelo para Alé”, especificaron. Sin embargo, luego de tomar unos tragos de la bebida de pomelo, el esposo de Pérez Pilo le convidó de la misma botella al agente del Servicio Penitenciario Bonaerense Federico Ferreira. “A los cinco minutos de haber tomado la gaseosa, el preso y el penitenciario comenzaron a convulsionar y se desvanecieron, por lo que fueron trasladados de urgencia a la sala de terapia intensiva”, explicó una fuente policial.
La Policía Bonaerense detuvo a ambas mujeres en el hospital de la zona. Ayer, por su parte, el fiscal a cargo de la causa, Marcelo Sellier –de la UFI 9– ordenó allanar los domicilios de las dos imputadas: en la casa de Pérez Pilo en La Plata, los efectivos de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) Quilmes encontraron oculto un frasco de “Hor tal”, un poderoso insecticida mata hormigas.