La cara de pocos amigos del presidente de Boca, Daniel Angelici, en el estadio Malvinas Argentinas mientras se iba consumando la derrota por 2-0 frente a River en la final de la Supercopa Argentina, parecía decirlo todo. Sin embargo, el dirigente se presentó ayer en Casa Amarilla para esgrimir su crítica cara a cara con los jugadores y el cuerpo técnico. “Se acabaron los privilegios y concesiones para todos”, le dijo. La derrota caló hondo.
El tono y los retos circularon por las redes sociales. “Ahora tienen que viajar todos y traer los tres puntos de Tucumán y ganar la Superliga y la Copa Libertadores, para devolverle una alegría a los hinchas”, los cruzó el dirigente a los integrantes del plantel xeneize.
En Mendoza, Angelici ya había dado muestras de su malestar frente al planteo del entrenador Guillermo Barros Schelotto para la final y ante la actitud de los jugadores, a los que también cuestionó por las quejas a raíz de la demora y los dos cambio de aviones que debieron atravesar camino a la provincia cuyana.
Durante su dura intervención –en la que no dejó espacio para la réplicas–, Angelici llegó a decirles a los jugadores que quedaron en “la historia negra” del club y les recriminó por la falta de actitud en la final perdida contra el clásico rival, les pidió también que se hagan cargo de la situación y les remarcó que no le templará la mano “para echar a nadie”. También trascendió que el capitán Pablo Pérez pidió la palabra para expresarle al presidente xeneize que los jugadores iban a intentar revertir la situación.
El partido de visitante frente a Atlético Tucumán será el primer paso. Boca buscará allí los tres puntos para continuar afirmándose en la punta de la Superliga, donde se le acercan Talleres e Independiente. El Mellizo tendrá que meter dos cambios obligados con respecto a la formación que perdió en Mendoza, ya que no podrá contar con los colombianos Frank Fabra y Edwin Cardona, quienes deben cumplir una fecha de suspensión por acumulación de amarilla. Emanuel Mas ingresaría como marcador de punta izquierdo, mientras que en la delantera pujan por un lugar Wanchope Abila y Gonzalo Maroni. En caso de que el elegido sea el ex delantero de Huracán, seguramente Tevez jugará unos metros retrasado. La dudas se terminarán de despejar hoy, cuando el Mellizo pare el equipo que jugará en Tucumán.