Apenas pasadas las 10 de la mañana, Carlitos Tevez llegó en una camioneta Porsche al Registro Civil de San Isidro con Vanesa Mansilla, su pareja desde hace 15 años, y sus tres hijos: Florencia (9), Katie (6) y Lito (2). El más chiquito estaba vestido con un traje color celeste pastel y camisa blanca, igual que su padre, el flamante novio. La familia fue completa, incluida su perrita, Dulce.
Los primeros en llegar al registro civil fueron Fernando Tobio, compañero de equipo y amigo personal de Tevez, y el ex delantero Marcelo "Chelo" Delgado. Un grupo de invitados claramente xeneize pobló el lugar, desde el presidente del club Daniel Angelici hasta el empresario futbolístico Guillermo Coppola. Por fuera del balón, entre otros invitados estuvo el diseñador de calzado Ricky Sarkany, entre otros.
"No se va, Carlitos no se va", fue la canción más entonada por los cientos de fans que se agolparon el ingreso al Registro Civil para celebrar con el Apache y su familia, pero para dejar constancia de lo que quieren los hinchas de Boca. Es porque jugador va a definir la semana que viene si sigue o no en el club, ya que tiene una oferta económicamente irresistible para ir a China.
Antes de la gran decisión y con la libreta azul de matrimonio, el flamante matrimonio va a celebrar a todo trapo a Carmelo, Uruguay, por cuatro días. A las 11 de la mañana, los novios salieron del registro civil y recibieron la tradicional lluvia de arroz. Después, fueron con sus hijos y 260 invitados a dos catamaranes especialmente decorados para cruzar el Río de la Plata hacia la ciudad de Carmelo, en Uruguay.
Porque la boda del Apache se planeó así, en dos países y por cuatro días. Los invitados se van a hospedar en el Four Seasons y, según trascendió, el festejo le costó al futbolista más de 100 mil dólares.