A días de un nuevo aniversario del último golpe de Estado, el pedido de liberación o domiciliaria para un grupo de genocidas condenados -incluidos entre ellos al ex marino Alfredo Astiz- generó indignación entre los familiares de desaparecidos y los organismos de derechos humanos. Para algunos, el pedido significó una nueva “provocación” del Gobierno que continúa el “ataque permanente a las políticas de verdad y justicia”. “¿No será que los que hoy nos gobiernan están devolviendo los favores económicos que sus familias recibieron durante la dictadura?”, denunció Mabel Careaga, hija de una de las Madres de Plaza de Mayo desaparecida en el secuestro de los 12 de la Santa Cruz.
“Estamos shockeados. No podemos creer que a la lista que ya habían publicado para beneficiar a genocidas de la ESMA incluyeran también a Alfredo Astiz, una figura destacada en la represión y terrorismo durante la dictadura. Tuvo un papel perverso en la infiltración de las Madres”, recordó la hija de Esther Ballestrino de Careaga, una de las madres secuestradas por la infiltración de Astiz, que se sumó a las rondas y llegó a ganarse la confianza de las Madres.
Mabel recuerda que su madre le contaba de “un muchacho rubio muy joven, hermano de desaparecidos” que había comenzado a ir a las rondas. “Se fue ganando la confianza de mi mamá y de otras madres. Llegó a la perversidad de llevar a Plaza de Mayo a una joven que estaba secuestrada en la ESMA para hacerla pasar por su hermana. Toda esa infiltración terminó con el secuestro conocido como el del grupo de los 12 de la Santa Cruz”, contó la integrante de Familiares y Compañeros de Los 12 en declaraciones a Radio 10.
Para Careaga, el pedido de liberación o prisión domiciliaria de condenados por delitos de lesa humanidad no es otra cosa que “una nueva provocación” y búsqueda de impunidad para los genocidas. “Los familiares esperamos más de 40 años pidiendo justicia por las vías pacíficas. Ellos tuvieron un juicio justo y fueron condenados con innumerables pruebas por sus crímenes. Venir ahora a pretender que cumplan la condena en la tranquilidad de su hogar es una provocación. ¿O no será que las familias que hoy nos gobiernan están devolviendo los favores económicos que recibieron durante la dictadura?”, apuntó contra el Gobierno.
La militante de derechos humanos recordó que “desde el inicio del mandato de Macri ha habido un ataque permanente a las organismos y a las políticas de verdad y justicia”. “Intentaron la liberación de genocidas desde diferentes medios como el 2x1 y las domiciliarias de personajes menos conocidos que no trascienden”, sostuvo Mabel Careaga, que llamó a que la marcha del 24 de marzo sea masiva para reforzar que “no olvidamos, no nos reconciliamos y el único lugar donde debe estar un genocida es la cárcel”.