Editors parece una de esas bandas destinadas a lidiar con las comparaciones hasta el fin de sus días. Desde el apodo “Boy Division” impuesto con gracia por la prensa especializada tras la aparición de su debut The Back Room, en 2005, por sus similitudes con la banda de Ian Curtis, hasta su compatibilidad estética con otros grupos ingleses como Depeche Mode, Coldplay y Muse, los de Birmingham siempre intentaron mutar en busca de su propio camino. En esa dirección Violence, su flamante sexto disco, es quizás su obra más experimental, con canciones que avanzan entre el electro-pop, el dark y el ambient, impulsadas por la voz grave y potente del cantante Tom Smith.
“Estamos comprometidos en cambiar nuestro sonido de un disco a otro de modo bastante salvaje”, le asegura al NO el baterista Ed Lay. “En este álbum reunimos un conjunto de canciones pop que nos parecían interesantes y disfrutábamos de tocar. Creo que obtuvimos un balance entre el sonido electrónico y el de banda. Nos importa que en vivo todo suene potente y orgánico.”
Bajo la producción de Leo Abrahams --músico inglés que trabajó junto a Brian Eno, Jarvis Cocker, Carl Barât y Paul Simon--, durante un año y medio Editors se sumergió en un proceso de prueba y error en busca de una nueva forma para esas canciones de textos oscuros. “Para mí suena más moderno que cualquier otra cosa que hayamos hecho”, dice Lay. “Sobre todo por los instrumentos que usamos y la búsqueda de los timbres de cada elemento.”
En relación a las referencias con las que suele medirse a la banda, el baterista tampoco evade lo obvio: “Depeche Mode siempre será una referencia para nosotros, ellos tienen la misma estética que buscamos, con rock y electrónica, pero sobre todo con grandes canciones pop”, dice. “Para nosotros es LA banda.”
Su disco, con un título como “Violence”, salió justo alrededor del 8M... ¿Cómo experimentan la lucha feminista y la puesta en crisis de prácticas naturalizadas durante tantas décadas?
--Creo que el movimiento es fantástico. Es bueno ver cómo crece año a año y cómo se empiezan a cuestionar cosas que siguen muy arraigadas hoy. Es bastante deprimente ver cómo se sigue matando mujeres, cómo sigue imperando el machismo en tantos espacios. En la música la misoginia es muy grande. El mundo sigue siendo un lugar muy opresivo y las mujeres siguen sufriendo muchos tipos de abusos, y lamentablemente parece que el camino para revertir eso es muy largo.
Después de la partida del guitarrista Chris Urbanowicz y la posterior crisis que atravesaron, ¿cuál es el desafío actual para Editors?
--Todos tenemos familias y una vida por fuera de la música, estamos muy ocupados con las giras, las promociones y eso, y no tenemos tiempo libre como antes. Ya no podemos hacer las cosas como si tuviéramos 20 años, así que se trata de buscar un balance entre ser una banda cool, conocer gente, tocar en vivo y mantener en foco nuestras cabezas y nuestro proyecto. Pero, por sobre todo, el desafío sigue siendo ser originales.
Hace un tiempo lanzaron su propia cerveza, ¿qué tiene que ver eso con su música?
--Fue la iniciativa de una empresa de Bruselas que quería que colaboremos con ellos para hacer una cerveza. Describimos qué tipo de cerveza nos gustaría que llevara nuestro nombre y ellos la hicieron. Fue una oportunidad completamente diferente, que también llega a la gente y la puede hacer feliz. ¡Ahora se vende mucho y está buenísima!