Alrededor de 50 civiles, entre ellos mujeres y niños, murieron ayer en bombardeos turcos contra una localidad del noroeste de Siria controlada por el grupo Estado Islámico (EI), en el marco de una ofensiva que dejó también 16 soldados turcos muertos en los últimos dos días, informaron autoridades y activistas. Los bombardeos en Al Bab, a 25 kilómetros de la frontera turca, fueron lanzados por aviones turcos y causaron la muerte de al menos 47 civiles, incluyendo a 14 menores y nueve mujeres, en un recrudecimiento de la batalla por el control del principal feudo de los yihadistas del EI en el noreste de la provincia de Alepo. La ONG, Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Londres y una red de informantes en Siria, no descartó un aumento del número de fallecidos ya que había heridos graves y desaparecidos bajo los escombros. Desde fines de agosto, grupos rebeldes sirios y tropas turcas llevan adelante una operación denominada “Escudo del Éufrates” para expulsar al EI del norte de la provincia de Alepo e impedir el progreso de la alianza armada kurdo-árabe Fuerzas de Siria Democrática (FSD), apoyada por Estados Unidos. Los ataques aéreos de ayer se produjeron después de que 14 soldados turcos perecieran y otros 33 resultaran heridos por ataques de los extremistas, en el día de más bajas mortales para el Ejército turco desde que lanzó su invasión del norte de Siria.