Carlos Beldi, el abogado del juez de línea Martín Bustos, quien ya se encontraba detenido por explotar sexualmente a jugadores de las ligas inferiores de Independiente, fue aprehendido por “destruir a golpes de martillo” el celular de su cliente “para borrar evidencias”, informaron fuentes judiciales. El letrado fue detenido por “encubrimiento” horas después que quedara detenido su cliente, quien se había mantenido prófugo de la justicia desde que trascendió la denuncia del caso y hasta el sábado último.

Ambas detenciones fueron ordenadas por la fiscal que investiga los hechos, la titular de la UFI 4 de Avellaneda, María Soledad Garibaldi. Fuentes judiciales informaron que fue rastreando la señal del mismo celular que Beldi intentó destruir que las fuerzas policiales habían logrado dar, el sábado a la mañana, con la ubicación de Bustos, que fue detenido en la localidad de Talar de Pacheco. Según presumen los investigadores, el aparato almacenaba conversaciones y fotos de Bustos con las víctimas o eventuales clientes, datos e imágenes que podrían ser utilizados como pruebas en la causa.

La Justicia investiga la participación del juez de línea Bustos en una red de explotación sexual de chicos menores de edad que revistaban en las divisiones inferiores de Independiente, y que se alojaban en la pensión que el club tiene en Villa Domínico. De acuerdo con las hipótesis de los investigadores, la red habría contado como facilitador con un chico de 19 años, también residente en la pensión, porque revistaba en la cuarta división del club. Fuentes de la investigación señalaron, además, que ese chico de 19 años podría haber sido también víctima de la red antes de asumir el rol de entregador de sus compañeros más jóvenes.

Las víctimas son al menos tres chicos de entre 14 y 17 años que vivían en la pensión del club de Avellaneda, en Villa Domínico, donde residen actualmente 53 chicos de entre 13 y 19 años, llegados de distintas provincias del país.

Los hechos comenzaron a ser investigados por una denuncia realizada el martes por el propio club, cuando uno de los chicos contó al psicólogo de la institución lo que había sucedido y brindó nombres de quienes lo habían captado y abusado de él.

Bustos, de 35 años, es abogado y ocupaba el cargo de secretario de Seguridad y Prevención de la Asociación Argentina de Árbitros. El viernes, además, trascendió que el padre del árbitro, Jorge Horacio Bustos, había sido condenado el año pasado por abuso sexual, por lo que dejaron Trenque Lauquen, donde vivían, y se instalaron en Escobar. Según fuentes judiciales, Bustos padre había sido condenado por abuso sexual a tres años de prisión en suspenso e “inhabilitación de 10 años para conducir y/o realizar cualquier actividad donde estén inmersos menores de edad”, vigente hasta abril de 2027, por hechos ocurridos cuando trabajaba como chofer de un micro de transporte escolar.

El árbitro Bustos fue hallado el sábado, luego de que, de acuerdo con fuentes judiciales, la fiscal advirtiera que la había engañado, “argumentando que se iba a entregar en un lugar” pero ocultándose en otro domicilio. Finalmente, fue detenido con un operativo cerrojo establecido sobre siete manzanas a la redonda, desde calle Lisandro de la Torre a Coronel Pringles y desde calle Chascomús a Azul de Los Troncos del Talar.