El Concejo aprobó ayer una suba del 25 por ciento en la tarifas de taxis y remises. A partir de su promulgación, la bajada de bandera diurna costará 37 pesos y cada ficha 1,70, mientras que la nocturna y días feriados será de 43 y 1,90 pesos. Aunque recibió fuertes críticas por no reglamentar la ordenanza vigente que contempla el llamado a concurso, el oficialismo logró avanzar con la prórroga por un año del mandato de los ocho jueces subrogantes nombrados en 2016 cuando se decretó la emergencia en Seguridad. En la primera sesión ordinaria, los ediles aprobaron varios proyectos, entre los que se destacan la propuesta de destinar el edificio de la ex cárcel de mujeres para transformarlo en un espacio destinado a desarrollar políticas de género y la creación del registro de salones de fiestas.

La Comisión de Servicios Públicos había abrochado hace un par de semanas el acuerdo para incrementar la tarifa de taxis y remises un 25 por ciento, porcentaje que se acordó con los representantes del sector, a pesar de que el último estudio de costos, de noviembre del año pasado, arrojó un desfasaje del 50 por ciento. Al jueves siguiente la sesión se suspendió por el paro municipal. La comisión ratificó el despacho, pero una nueva medida de fuerza de los municipales malogró la sesión. Con el jueves santo en el horizonte, los ediles decidieron sesionar ayer.

El aumento, que hoy firmará la intendenta Mónica Fein, solamente fue rechazado por la concejala Fernanda Gigliani, quien había anticipado su voto en contra. Con la aprobación, la bajada de bandera para remises costará 46 pesos, la ficha 2,30 y el minuto de espera 3,45.

La polémica se encendió en el renovado recinto de sesiones del Palacio Vassallo por el pedido del oficialismo para prorrogar los mandatos de los jueces subrogantes de Faltas, y el del bloque Cambiemos para reglamentar la ordenanza sobre la designación de los jueces de Faltas, aprobada en el 2014, vetada por la intendenta, y nuevamente ratificada por el Concejo, aunque Fein no la reglamentó.

El concejal oficialista Aldo Poy solicitó que la prórroga se aplique al momento en que a los jueces se les venció el mandato, lo que provocó un encendido reclamo del concejal justicialista Roberto Sukerman, quien junto a Eduardo Toniolli y Osvaldo Miatello votaron en contra. Sukerman cuestionó a la intendenta por no publicar la ordenanza, y defendió la ordenanza aprobada, de la que fue coautor junto a Diego Giuliano, para que los jueces de Faltas "no sean nombrados a dedo por el intendente de turno". Para el concejal del PRO, Roy López Molina, la discusión de la prórroga, que el bloque finalmente acompañó, no es importante, como sí lo es la falta de cumplimiento de la ordenanza, y propuso que hasta su reglamentación se suspendan otros nombramientos.

Los ediles también aprobaron la modificación de la ordenanza de administradores de consorcios para transparentar la liquidación de expensas, un proyecto por el cual la Oficina Municipal del Consumidor deberá participar de todas las audiencias sobre servicios públicos.