La abuela de Sergio Giglio, el muchacho de 22 años que murió el pasado sábado en el hospital Eva Perón tras estar detenido en la subcomisaría 21º, desplegó ayer sus sospechas sobre la responsabilidad de la policía en el caso. "Sólo tenía golpes en la cabeza", dijo mientras se realizaba la autopsia sobre el cuerpo de su nieto. "La información que tenemos no nos cierra; supuestamente lo encontraron tirado detrás del Carrefour; luego lo trasladaron al hospital, lo regresaron a la comisaría y de ahí volvió al hospital, inconsciente, prácticamente sin vida", contó Urbana Ramírez, para agregar que su nieto "tenía la cabeza destruída". Y si bien aún no sabe "qué le paso ni cómo fue", sabe que su nieto de 22 años terminó muerto luego de estar detenido en el calabozo de una comisaría.

Sergio Giglio tenía 22, una pareja y una nena de 3 años. Todos los días se levantaba a las 4 de la mañana y esperaba que su patrón lo pasara a buscar. Era ayudante de albañil. El lunes de la semana pasada su empleador lo dejó a las 19.30 en Circunvalación y Juan José Paso, para que tome el colectivo 142 en Donado y Juan José Paso. Nunca llegó a su casa.

El martes a la mañana un llamado al 911 dio cuenta sobre la presencia de un joven que yacía malherido a la vera de Circunvalación, a metros del ingreso al supermercado Carrefour. A partir de allí, el muchacho fue trasladado al hospital de Baigorria, donde le realizaron curaciones. Sin embargo, quedó detenido en la subcomisaría 21ª, ante la sospecha de haber tenido participación en un robo cometido en la zona donde había sido encontrado y el hecho de negarse a brindar su identidad.

"Sergio estaba trabajando, pero se lo acusa de un robo que hubo a las 10 de la mañana por una denuncia, pero en verdad el patrón lo bajó de la camioneta y de ahí lo detuvieron", señaló Ramírez al referirse a la versión policial y de la Fiscalía, mientras espera el resultado de la autopsia.

En ese sentido, la mujer señaló: "Me quedan dudas, porque la policía lo detuvo, lo llevó al hospital y después lo volvió a trasladar a la comisaría. Tengo la sospecha de que fue la policía". Y agregó: "No tiene otro golpe que no sea en la cabeza; no hay ningún órgano dañado, nada".

La versión policial asegura que "una vez dentro del penal el muchacho fue identificado como Sergio Giglio, de 22 años, sufrió una descompensación en el calabozo donde lo alojaron, por lo que debió ser trasladado de urgencia en una ambulancia del Sies nuevamente al Policlínico Eva Perón donde sufrió un paro cardiorrespiratorio y quedó internado en terapia intensiva con respiración asistida" hasta la madrugada del sábado, cuando se comunicó su fallecimiento.

En tanto, el fiscal de Flagrancia, Rodrigo Urruticoechea, que tomó el caso en primera instancia, le dio aviso a Adrián Spelta, de Homicidios Dolosos y a su par de Violencia Institucional, Karina Bartocci, para investigar el caso, ya que la descompensación se produjo en la sede policial ubicada en Gauna al 7900, del barrio 7 de Septiembre, donde había sido trasladado por la policía bajo las órdenes del fiscal Urruticoechea.

Los resultados forenses del cuerpo del joven, aun no fueron entregados a a la familia.