Desde Santa Fe

Miguel Lifschitz distinguió ayer entre la discusión salarial en el sector público y la mesa paritaria. A la primera, la cerró por decreto al disponer el pago del 18% en dos veces (9% en marzo y otro tanto en agosto) a estatales, maestros, trabajadores de la salud y policías, entre otros. Y a la segunda, la dejó abierta, pero para tratar asuntos no monetarios y hasta adelantó que la semana que viene ‑después de los paros docentes del 4 y 5 de abril‑ volverá a convocar a los líderes de Amsafé y Sadop. "Es la solución", planteó el gobernador. Y la justificó en un hecho nuevo: que uno de los sindicatos estatales Upcn apoyó la propuesta ‑por apenas 45 votos‑ y lo mismo hicieron dos gremios docentes minúsculos: UDA y Amet. "Esto generó un desequilibrio" con los cinco que la rechazaron (ATE, Siprus, Amra, más Amsafé y Sadop). "Nosotros estábamos obligados a aplicar el aumento a los que aceptaron", entonces para evitar una "situación injusta, irritativa y no conveniente", que "altere el funcionamiento institucional tomamos la decisión de que el aumento se aplique a todos los sectores", explicó.

El gobernador defendió el cierre de la discusión salarial por decreto y el descuento de los días de paro, junto a los cuatro ministros que negocian las paritarias: Pablo Farías y Gonzalo Saglione ‑con Upcn y ATE‑ y Claudia Balagué y Julio Genesini ‑con Amsafé y Sadop‑. Era una conferencia de prensa que se limitó a sólo a cinco preguntas. En principio, estaba prevista en la planta baja, pero una asamblea de delegados de base de ATE en la Casa Gris obligó a mudarla al primer piso, al salón Oval de la Gobernación.

Una de las preguntas incomodó al mandatario cuando le recordaron que era el primer gobernador socialista que cerraba una discusión salarial en el sector público por decreto, que eso no había ocurrido en los últimos once años, en los gobiernos de Hermes Binner y Antonio Bonfatti y en los primeros dos del propio Lifschitz. "Toda negociación tiene dos posibilidades: el acuerdo, como ocurrió habitualmente (en la década 2007‑2017) y el desacuerdo, como ocurre ahora", respondió el gobernador. "Entonces, hay que buscar una solución ‑como la llamó‑ para que los trabajadores puedan tener el salario actualizado. Eso es lo que ha ocurrido, pero no hemos cerrado la mesa paritaria".

-‑Si descuentan los días de paro se va a profundizar el conflicto. Y eso puede derivar en una sucesión de paros hasta fin de año ‑le planteó el colega. 

-‑Bueno, eso tendrá que ver con la responsabilidad que debemos tener todos para buscar una solución por la vía del diálogo. El diálogo está abierto. Y tenemos que encontrar mecanismo para lograr la solución del problema. ‑insistió Lifschitz.

Otra periodista volvió sobre el asunto, que en once años todas las paritarias habían cerrado en acuerdos y ésta era la primera que cerraba la discusión salarial por decreto. "¿Por qué? Qué pasó?", preguntó. "Lo que cambió y no sucedió en otras ocasiones, es que ahora Upcn apoyó la propuesta. Esto generó un desequilibrio que no se había producido antes. Al haber aceptado Upcn y los gremios minoritarios docentes UDA y Amet, nosotros estábamos obligados a aplicar el aumento. Pero si no hacíamos esto, hubiéramos dejado en una situación diferente a los sindicatos mayoritarios, Amsafé y Sadop". Entonces, "en una escuela, los asistentes escolares (afiliados a Upcn) cobrarían el 9% y los docentes no, en una situación injusta, irritativa, no conveniente", que podría alterar "el funcionamiento institucional. Por eso, tomamos la decisión de que se aplique el aumento a todos los sectores", justificó Lifschitz.

El gobierno insiste que el aumento es el 18%, pero los gremios sostienen que el incremento real es el 16,9% porque restan el 1,1% de la actualización por cláusula gatillo de 2017. Lifschitz dijo que fue "error haber actuado con demasiada premura y haber reconocido de manera automática" esa diferencia. "Era lo que nos habíamos comprometido a hacer, por eso quisimos cumplir con el compromiso. Pero en realidad, tendríamos que haber hecho como en otras provincias que no lo aplicaron directamente y entonces lo incorporaron en la discusión salarial del año siguiente. Pero está claro que la base de comparación siempre es el mes de diciembre anterior. Y el 18 por ciento se aplica sobre el mes de diciembre anterior. En eso no hay discusión", concluyó.