Desde Santa Fe
Miguel Lifschitz descargó la responsabilidad política por los tarifazos en la provincia en el ministro de Energía de la Nación, Juan José Aranguren. Lo señaló con nombre y apellido. El gobernador admitió que el aumento de las facturas de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) es "desproporcionado", pero lo atribuyó a la decisión del gobierno de Mauricio Macri y de Aranguren de suprimir de manera "abrupta e insensible" los subsidios nacionales, lo que significó que el precio de la energía mayorista aumentara "más de 2.000 por ciento" en los últimos dos años, según la secretaria de Estado de Energía Verónica Geese. "Esto nos obligó a trasladar los costos" a los usuarios santafesinos. "El incremento de la luz es una situación excepcional y ajena a Santa Fe que afecta a todas las provincias por igual", se justificó el mandatario.
Lifschitz se sumó ayer a la polémica que había arrancado el miércoles con un cortocircuito entre Geese y el intendente de Santa Fe José Corral, quien en una reunión con empresarios pidió "discutir el precio de la tarifa eléctrica" en la provincia. "Necesitamos saber por qué en Santa Fe la luz cuesta más cara que en Córdoba o en Buenos Aires. Hay que poner los costos de Santa Fe sobre la mesa", planteó Corral.
Geese le contestó que las tarifas aumentan en Santa Fe porque desde que asumió Macri, en diciembre de 2015, el precio de la energía mayorista se incrementó "más de 2.000 por ciento por la quita de los subsidios nacionales". "Corral habla del costo Santa Fe. Pensé que habíamos aclarado que vender humo no es hacer política", chicaneó la funcionaria. Y publicó un cuadro tarifario comparativo de las empresas eléctricas de Santa Fe, Córdoba y Buenos Aires, que ubica a la EPE por debajo de las demás.
Corral intentó desviar el eje del debate con otra chicana. Pero ayer el gobernador respaldó a su secretaria de Energía, coincidió en su preocupación por la escalada de las tarifas de la EPE, admitió que "hubo un aumento desproporcionado de la luz", pero aclaró que "tiene que ver con el incremento de la energía mayorista".
"Hay una política del gobierno nacional, del ministro de Energía, el señor Aranguren, de quitar de manera abrupta e insensible los subsidios a la energía", tiró el gobernador. "Y ahora nos enteramos que además viene otro aumento sobre el gas. Esto es lo que obliga a las provincias como Santa Fe que no producimos energía, que la recibimos del sistema nacional y la distribuimos, a trasladar los costos a la tarifa final" que pagan los usuarios. "No tenemos otra manera", dijo.
"Los incrementos (de los servicios públicos) que hemos promovido desde la provincia en general están en otra sintonía. Pero la luz es una situación excepcional y ajena a Santa Fe, que afecta de la misma manera a todos los gobiernos provinciales", cerró Lifschitz.
Otro que se sumó a la réplica a Corral fue el diputado de la UCR Jorge Henn, en el mismo tono de Lifschitz y Geese. "El intendente de Santa Fe cuestiona el aumento" de tarifas de la EPE, pero "no dice que ese incremento tiene directa relación" con la suba del precio de la energía mayorista que autorizó Aranguren". Desde que asumió Macri, "Aranguren ordenó aumentos superiores al 2000 por ciento en el costo del MW, o sea, que fue el propio gobierno nacional ‑del que Corral forma parte‑ el que aumentó las tarifas que ahora él dice desconocer", reprochó Henn.
"Para que se entienda con claridad: cuando asumió Macri, la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Elécrtico (Camesa) le facturaba a la EPE unos 90 millones de pesos por mes. Hoy esa factura supera los 1.200 millones mensuales. Y el precio del megavatio (MW) pasó de 50 a 1.070 pesos en bandas residenciales". ¿Entiende Corral de donde viene el aumento? No queremos pensar que intenta confundir a los santafesinos para ganarse la simpatía del presidente y sus empresarios amigos", dijo Henn. Y planteó que a Corral "no le interesa conocer lo que le cuesta a la EPE la energía y cuáles son sus gastos operativos". Entonces, "prefiere echar un manto de dudas y sospechas donde no cabe una sola duda, y donde no hay un solo espacio para la sospecha", concluyó el legislador.