El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, confirmó el fallecimiento de 68 personas tras un incendio en la Comandancia de la Policía del estado Carabobo, ubicado en la capital estatal, Valencia. “Hemos designado cuatro Fiscales (tres regionales y uno nacional) para esclarecer estos dramáticos hechos”, informó el funcionario a través de su cuenta en Twitter. Saab también señaló que el Ministerio Público profundizará las investigaciones,”para esclarecer de forma inmediata estos dolorosos acontecimientos, que han enlutado a decenas de familias venezolanas, así como establecer las responsabilidades a que haya lugar”.

Por su parte, el Parlamento venezolano, de mayoría opositora, abrirá una investigación por las decenas de víctimas de un incendio provocado el miércoles a la noche, durante un motín en la Comandancia de Policía del estado Carabobo, informó ayer el jefe de la bancada opositora, Juan Guaidó.

“Lo sucedido en la Comandancia de PoliCarabobo no puede quedar impune. Desde la @AsambleaVE abriremos una investigación exhaustiva sobre este hecho, para dar a conocer a los ciudadanos el porqué de esta atrocidad”, escribió Guaidó en su cuenta de Twitter.

En los hechos, ocurridos el miércoles, varios detenidos tomaron como rehén a uno de los guardias, al parecer tras una requisa, y decidieran provocar un incendio con colchones que se salió de control, según versiones de prensa.

El diputado por Voluntad Popular (VP) tildó el suceso de “inaceptable” y exigió tanto al gobernador de este estado del centro del país, el oficialista Rafael Lacava, como a la ministra de Asuntos Penitenciarios, Iris Varela, un “pronunciamiento” sobre “este hecho atroz”. “Se ha iniciado una investigación seria y profunda para dar con las causas y los responsables de estos lamentables sucesos. Estamos al lado de familiares en su dolor y necesidades”, afirmó posteriormente el gobernador Lacava. El gobernador de Carabobo asumió el compromiso de crear “nuevos espacios” para presos y dijo que apoyará las acciones anunciadas por el fiscal general Saab. “Asumimos el compromiso de crear un consejo superior de seguridad (…) que permita descongestionar los retenes policiales (comisarias) y crear nuevos espacios para los privados de libertad en el estado Carabobo”, se lee en un comunicado firmado por Lacava en la página web de la gobernación.

“Los responsables (…) deben pagar por los delitos cometidos, tanto por acción como por omisión en este caso que hoy enluta a familiares y amigos de los privados de libertad fallecidos y a quienes hacemos llegar nuestras palabras de condolencias, apoyo y solidaridad”, añadió Lacava, siempre según el documento.

Por su parte, el dos veces candidato presidencial Henrique Capriles utilizó su cuenta de Twitter para preguntar: “¿Cuántas veces más vamos a ver las mismas escenas dantescas con los presos del país?”. “Más de 70 muertos hacinados en una sede policial muestra el fracaso de un gobierno que está obligado a garantizar la vida a los venezolanos. La pena de muerte NO existe en Venezuela! JUSTICIA”, añadió en referencia al número de víctimas.  

En tanto, la organización no gubernamental Una ventana a la Libertad, que trata el tema de las cárceles venezolanas, responsabilizó al Ministerio de Asuntos Penitenciarios y a su titular, Iris Varela.  El portavoz del grupo, Carlos Nieto Palma, dijo que la situación de los lugares de detención preventiva ha sido denunciada en varias oportunidades. “Es grave y alarmante. Lo que ocurrió en Carabobo es una muestra de ello y eso se vive en toda Venezuela”, señaló.

El motín desatado anteayer es el más grave registrado en Venezuela en los últimos 20 años. Es el segundo hecho más cruento en la historia de las  cárceles venezolanas. En enero de 1994, un motín y posterior incendio en la prisión de Sabaneta, en el estado occidental de Zulia, dejó 108 víctimas mortales, en lo que marcó el peor balance en la historia. En enero de 2013, en un motín en la cárcel de Uribana, en la región occidental de Lara, murieron 61 reclusos y en agosto del año pasado otros 38 presos fallecieron en el centro de detención judicial en la región sureña de Amazonas.

Lo ocurrido en el centro de detenciones de la policía de Carabobo estuvo rodeado por el silencio oficial hasta que el fiscal general Saab confirmó el saldo, en las primeras horas de este Jueves Santo. Saab, precisó que 68 personas murieron en lo que calificó de presunto incendio en ese centro. “A los 66 hombres y dos mujeres –que se encontraban en la instalación visitando a sus parejas–. A los mismos se les realizaron los respectivos protocolos de autopsia y entrega respectiva de los cuerpos a sus familiares”, dijo Saab.

Las primeras versiones dijeron que las víctimas fueron producto de quemaduras y asfixia al expandirse el incendio. Los calabozos de la comandancia de la policía de Carabobo son usados como cárcel provisional, desde donde muchos detenidos son llevados a los tribunales para recibir sus sentencias.

Según denunciaron a los medios locales y familiares de los presos en los alrededores de la comisaría de policía, los detenidos murieron por asfixia y quemaduras en el incendio del que aun se desconoce cómo se originó.

El miércoles a la mañana, el comando policial de Carabobo entregó 45 cuerpos de los 68 fallecidos a sus familiares, según informó la prensa local. Las autoridades solicitaron a personas, que buscan información sobre familiares, que les entreguen fotos recientes de los detenidos para reconocer a los que aún no fueron identificados.