Al menos cuatro personas resultaron heridas y una murió ayer en un tiroteo que habría derivado en suicidio en la sede central de la compañía YouTube en la ciudad californiana de San Bruno, a unos 20 kilómetros al sur de San Francisco. La policía informó que la atacante era una mujer y que murió, aparentemente, por un disparo que se efectuó ella misma. Sin embargo, no reveló la identidad de la tiradora ni explicó qué motivo pudo haberla llevado a abrir fuego.

El presidente estadounidense, Donald Trump, tuiteó que sus pensamientos y plegarias estaban con todos los afectados por el tiroteo y felicitó a las fuerzas del orden por su rápida respuesta.

Por su parte, Google, que es dueño de YouTube, tuiteó: “Estamos en coordinación con las autoridades y proporcionaremos información oficial de Google y YouTube cuando esté disponible”. El mes pasado, la plataforma de videos había anunciado que prohibiría los contenidos que promoviesen la venta de armas y accesorios de armas, así como también videos que enseñaran cómo fabricarlas. 

El jefe de policía de la ciudad, Ed Barberini, informó en rueda de prensa en el lugar que la policía encontró en el lugar a cuatro personas con heridas de bala que fueron trasladadas al hospital, aunque no dio precisiones sobre su estado ni identificó a ninguna de las víctimas. 

Brent Andrew, un vocero del Hospital General de San Francisco aseguró que el establecimiento había recibido a tres de los heridos: una mujer, de 27 años, que estaba bien, otra, de 32, que estaba en condiciones serias y un hombre, de 37, que quedó en estado crítico. Las condiciones de la cuarta víctima se desconocen así como también en qué hospital se encuentra. 

“Uno pensaría que después de que hemos visto los tiroteos en Las Vegas, Parkland, el club nocturno Pulse, habríamos visto el final de esto, pero no”, dijo el doctor Andre Campbell, un cirujano de dicho hospital. El médico informó que las heridas no parecían haber sido producidas por un arma del tipo AK-47 o AR-15, dando a entender que la atacante habría usado una arma convencional y no una automática.

Cientos de policías rodearon la sede de YouTube ayer por la tarde y comenzaron a buscar a un tirador activo luego de que empleados tuiteran haber oído disparos y haberse atrincherado en distintas partes del edificio.

Imágenes aéreas tomadas por canales de televisión mostraron a cientos de empleados que eran evacuados por la policía, que los obligaba a caminar con los brazos en alto y los registraba uno a uno. Las autoridades los evacuaron a un estacionamiento cercano. La policía instó a los empleados que hayan visto algo de primera mano a dar un paso al frente y casi una docena de personas se acercaron a los oficiales para informarles, según informó el diario estadounidense The New York Times. Muchos de ellos dijeron que primero habían pensado que se trataba de un simulacro de incendio. Otros, explicaron que corrieron cuando otras personas comenzaron a gritar que había un tirador.

“Escuché disparos y vi a gente correr mientras estaba en mi oficina. Ahora estoy atrincherado dentro de una sala con compañeros”, tuiteó Vadim Lavrusik, un empleado de YouTube.

Por su parte, Zachary Vorhies, un ingeniero de programación de la compañía dijo a la cadena ABC que estaba en su escritorio cuando escuchó tiros y después a alguien gritar: “vení y agarrame”. Cuando se asomó y revisó, vio a un hombre tirado en el piso con sangre en su abdomen y a la tiradora a unos metros, afirmó. Vorhies también dijo que hay puertas aseguradas en el edificio, pero que el tiroteo sucedió en un patio abierto que no resultaba ser particularmene seguro.

El hecho de que la tiradora haya sido una mujer resulta algo notable puesto que los tiroteos masivos son perpetrados casi siempre por hombres. Un estudio publicado por el FBI en el 2014 informó que, entre el 2000 y el 2013, sólo seis mujeres habían sido responsables de los 160 tiroteos masivos en Estados Unidos.

Otro de los empleados de YouTube envió un mensaje a su amigo, Will Hudson, quien dijo que escribió: “Creo que debe haber un tirador en mi edificio”. Y en otro mensaje se leía: “Se activó la alarma contra incendios así que empezamos a evacuar y después la gente empezó a correr diciendo que había un tirador”. Hudson, dijo que su amigo regresó a salvo a San Francisco y que estaba en contacto con su familia. Reflexionando sobre lo acontecido a su amigo, afirmó que se había acostumbrado a escuchar sobre tiroteos, pero que nunca había estado tan cerca de uno. “Se siente raro. Se siente como si realmente pudiera pasarle a cualquiera”, se lamentó.  

El gerente de proyectos de la compañía, Todd Sherman, dijo a la cadena CBS News que estaba sentado en una reunión cuando oyó a gente huyendo a la carrera. Al salir del lugar donde estaba, dijo haber visto gotas de sangre en el piso y las escaleras y haber escuchado a gente que decía que había un tirador.

Otro de los testigos fue un empleado de un restaurante de comida rápida, quien informó que ayudó a una mujer joven que había recibido un tiro en la pierna. Detalló que le hizo un torniquete con una soga elástica mientras esperaban a la ayuda.