"Es tiempo de actuar". Con estas palabras, Kristjen Nielsen, secretaria de Seguridad Nacional norteamericana, confirmó que Donald Trump tiene a la firma la orden para militarizar la frontera con México. El presidente prevé enviar a la Guardia Nacional, en días en que toma forma el controversial proyecto del muro fronterizo.
Respecto de la cantidad de soldados, la funcionaria dijo que serán "tantos como sean necesarios" para poder cerrar las "fisuras" que, en su opinión, se producen en la frontera y permiten el paso de inmigrantes ilegales. Según Nielsen, hubo un incremento de llegadas a la frontera, cuando los arrestos de inmigrantes ilegales el año pasado representaron la cantidad más baja desde 1971. En rueda de prensa, aseguró que hay un “fraude” en las peticiones de asilo, que se multiplicaron por diez en cinco años desde 2013 respecto del principal argumento para entrar a territorio norteamericano: el miedo por su vida. Nielsen explicó que el sistema migratorio de Estados Unidos obliga a dar asilo a quien dice que su vida corre peligro y que eso se usa como excusa para poder migrar.
La idea de Trump es que trabajen en forma conjunta Seguridad Nacional y el Departamento de Defensa junto a los estados fronterizos (California, Arizona, Nuevo México y Texas) en el despliegue de tropas, que se hará “tan rápidamente como sea posible",
La funcionaria aprovechó para enviar un mensaje al Congreso: pidió cambios en las leyes migratorias (la Casa Blanca tiene en ciernes un proyecto de ley) y que gire los fondos necesarios para poder construir el muro. Hace dos semanas, Trump hizo un viaje relámpago a California, donde vio modelos de muro para edificar.
A su vez, el Fiscal General (ministro de Justicia), Jeff Sessions, vinculó la decisión presidencial con la caravana de migrantes centroamericanos que recorre México. “El presidente tenía claro que esta caravana debía detenerse antes de que llegara a nuestra frontera sur, y sus esfuerzos ahora parecen tener éxito", afirmó.
Al otro lado de la frontera, el gobierno de Enrique Peña Nieto se manejó con cautela ante la noticia. El presidente dijo que “tendrá una posición” recién si se produce la movilización de tropas. En los mismos términos se expresó el canciller Luis Videgaray, de visita en Washington en las horas previas al anuncio, quien tiene previsto reunirse con Jared Kushner, el yerno de Trump, para hablar de la relación bilateral
Mientras, el candidato de izquierda, Andrés López Obrador, habló en duros términos. “Si el señor Donald Trump hace eso, lo digo con todo respeto, nosotros en los 3185 kilómetros de frontera que tenemos con Estados Unidos vamos a hacer una manifestación, una cadena humana, todos vestidos de blanco pidiendo la paz y el progreso”, expresó el máximo favorito a hacerse con la presidencia en las elecciones de julio.