El bebito simil Indio Solari, el bebito simil Nirvana, el bebito de la suerte, el bebito fumón, el bebito en un depósito de la Iglesia, el bebito meme fue una de las formas de lucha y conquista del feminismo en las redes sociales. La Iglesia Católica y evangélica no llamo institucionalmente a manifestarse en contra del proyecto por el aborto legal, seguro y gratuito, pero sí asociaciones anti derechos. El 25 de marzo (en nombre del día del niño por nacer instituido, a pedido del Opus Dei, en el gobierno de Carlos Menem) se congregaron en la Facultad de Derecho de la UBA grupos y adherentes a los adoradores del embrión (como lo definió la comediante Dalia Gutmann) y en contra de los derechos de las mujeres. Pero, además de los argumentos éticos, jurídicos, de salud pública y de derechos humanos, una de las más poderosas herramientas contra el lobby conservador es el humor y el uso libre a través de las redes sociales. “Los memes marcan un giro importante en el debate”, rescata Claudia Laudano, Profesora e Investigadora de la Universidad de La Plata (UNLP), especializada en tecnologías digitales. “Hace algunos años era impensable una catarata tal de memes ironizando sobre el muñeco gigante que desplegaron lxsantiderechos el 25 de marzo. Se venía cocinando la idea, sobre todo, luego de la propuesta del muñeco de plástico que bautizaron “bebito”. Se sabe que los memes no son respuestas racionales, argumentativas, sino intervenciones reactivas, que se generan con creatividad y que, en general, generan risa y adhesión entre quienes circula”, destaca. 

Y apunta sobre la importancia de las redes sociales (incluso Instagram donde la imagen desplaza a los argumentos textuales) en un clima de época que empujó el avance en el Congreso de la Nación para el aborto legal, seguro y gratuito: “Mientras el debate legislativo empieza a tomar forma, el clima de opinión pública a favor del aborto legal en redes sociales y en actividades callejeras no cesa; más bien, se intensifica. En el caso de Twitter, sin importar el hashtag que se proponga, se instala como tendencia de debate durante horas. Así ocurrió con #YoVotoAbortoLegal el 20 de marzo, el día inicial del debate en el Congreso cuando el hashtag acompañó desde las redes sociales la movilización en plazas del país durante ocho horas corridas como primera tendencia de debate; mientras que el día anterior, #LeydelaCampañaYa había trepado al primer puesto, donde permaneció por seis horas tras su estreno,  como parte de la estrategia planificada de la Campaña por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito que movilizó a sus activistas a la Quinta presidencial de Olivos para reclamar la aprobación de la ley. Como parte del pulso de una acción en pleno desarrollo, por momentos, se retorna al multiexitoso hashtag #AbortoLegalYa, mientras en la calle se despliega de modo incesante un repertorio amplio y variado de acciones, con bicicleteadas, semaforazos, fanzineadas, festivales, serigrafías, mesazas, carpas, volanteadas, murales, grafiteadas, pintadas y campañas de fotos con pañuelos verdes. Como una marea, dicen, o subiendo la apuesta, como un tsunami, hasta que el proyecto se convierta en ley de una vez por todas”.