La mujer que anteayer abrió fuego con una pistola en la sede central de YouTube en Estados Unidos estaba enojada con la compañía por el manejo que hacía de sus videos, informó su padre. El hombre afirmó, además, que él había alertado a la policía de que su hija podía atacar la empresa, donde finalmente fue e hirió a tres personas antes de suicidarse.
La policía confirmó que la mujer, Nasim Aghdam, de 39 años, estaba molesta con las prácticas de la empresa pero que no había dado señales de que podía cometer un ataque. Las autoridades también dijeron que Aghdam visitó un perímetro de tiro antes de conducir su auto a los cuarteles generales de la compañía propiedad de Google en la localidad californiana de San Bruno, a unos 20 kilómetros al sur de San Francisco, donde sacó una pistola y efectuó varios disparos. La mujer no conocía a las víctimas, por lo que se cree que no las atacó de manera puntual, informó también la policía.
La agresora ingresó al edificio desde un playón de estacionamiento, afirmó el jefe de la policía de San Bruno, Ed Barberini, en rueda de prensa. Y agregó que Aghdam había dicho a miembros de su familia que creía que YouTube estaba reprimiendo su creatividad y rechazando sus videos, además de que había dejado de pagarle por sus contenidos. Los youtubers pueden recibir dinero de la publicidad que acompaña a sus videos, pero la compañía “desmonetiza” algunos canales por ciertas razones, incluyendo por contener material inapropiado o por tener menos de 1000 seguidores. Los videos de Aghdam incluían segmentos sobre el veganismo, la crueldad contra los animales y el ejercicio, así como imágenes de ella misma.
Medios estadounidenses informaron que los investigadores creen que Aghdam tenía una larga disputa con YouTube y que aparecía en Internet y las redes con el seudónimo de Nasime Sabs. Una página web con ese nombre deplora las políticas de YouTube y dice que la compañía busca reprimir a los creativos.
“¡Youtube filtró mis canales para impedir que recibieran vistas!”, dice uno de los mensajes del sitio. “¡No hay oportunidades de un crecimiento igualitario en YouTube ni en ningún otro sitio para compartir videos, (y) tu canal crecerá sólo si ellos quieren!”, afirma otro.
El padre de la mujer, Ismail Aghdam, dijo al portal de noticias Bay Area News Group que su hija odiaba a YouTube. El hombre agregó que el lunes llamó a la policía para denunciar que su hija estaba desaparecida luego de que no le contestara el teléfono durante dos días, y que les advirtió a los oficiales que podía ir a los cuarteles generales de YouTube.
Agentes de la localidad de Mountain View, a unos 50 kilómetros de la sede de YouTube, la encontraron dormida dentro de su auto en un estacionamiento alrededor de las 14 del martes, pero la dejaron ir luego de que ella se negara a responder sus preguntas, dijo ayer una vocera policial. Los oficiales pensaron que Aghdam no se veía como una amenaza para otros o para ella misma, dijo la portavoz, Katie Nelson. La oficial afirmó, además,que durante los 20 minutos que conversó con los policías, Aghdam parecía tranquila y explicó que había decidido abandonar su casa por problemas familiares. Nunca dijo nada de YouTube, añadió, citada por CNN.
La policía de Mountain View aseguró en Twitter y Facebook que los oficiales se comunicaron con su familia dos veces y que en ninguna oportunidad, ni su padre ni su hermano, mencionaron nada sobre actos de violencia potenciales o sobre la posibilidad de que pudiera tener una reacción violenta por el tema de sus videos.
Dos mujeres que resultaron heridas en el ataque dejaron ayer el hospital de San Francisco donde habían sido internadas. La tercera víctima, un hombre de 36 años, mejoró un poco y pasó de estado crítico a serio, informó el hospital en un comunicado.
YouTube es la compañía de videos online más grande del mundo. En su sede central trabajan más de un millar de ingenieros y empelados. “Hoy sentimos que toda la comunidad de YouTube, todos sus empleados, fueron víctimas de este crimen”, dijo Chris Dale, un vocero de la compañía. La CEO de YouTube Susan Wojcicki dijo ayer que la empresa se unirá para encontrar consuelo, como una familia.
El nuevo tiroteo ocurrió en medio de un renovado debate por el acceso a las armas en Estados Unidos, luego de que un joven de 19 años matara a tiros a 17 personas con un rifle en una escuela de la ciudad de Parkland, en el estado de Florida, en febrero pasado.