El juez de instrucción porteño Roberto Oscar Ponce rechazó ayer el pedido de excarcelación de Cristian Aldana, el cantante de la banda de rock El Otro Yo que fue detenido el jueves en el marco de una investigación por los delitos de “abuso sexual agravado y corrupción de menores”, a raíz de la acusación de al menos diez denunciantes. El magistrado tomó esta decisión al considerar que existe riesgo de fuga y que la libertad de Aldana podría entorpecer la continuidad de la investigación. En los próximos días el juez deberá resolver si le dicta o no la prisión preventiva.
Cristian Aldana fue detenido anteayer a pedido de la fiscal Betina Vota, a cargo de la fiscalía de instrucción porteña número 38, quien lo investiga por los delitos de “abuso sexual gravemente ultrajante y con acceso carnal en concurso ideal con corrupción de menores en calidad de autor, reiterado en siete oportunidades”. Según informaron fuentes policiales, la Justicia ordenó la realización de cinco allanamientos, todos en diferentes domicilios en el barrio porteño de Balvanera. En una de esas viviendas, los efectivos de la División Delitos contra Menores de la Policía Federal (PFA), capturaron al ahora imputado y secuestraron varios teléfonos celulares y computadoras que serán analizados por peritos tecnológicos para determinar si contienen documentación vinculada con la causa.
Ante la reclusión del cantante en la Unidad 28 del Servicio Penitenciario Federal, ubicada en el Palacio de Justicia en Lavalle 1337, su abogado solicitó la excarcelación, que fue denegada ayer por el juez Roberto Ponce, titular del Juzgado Nacional de Instrucción N° 17 de Capital Federal. En la resolución, Ponce advirtió que “no pueden obviarse las graves características de los hechos atribuidos al imputado, dado que sabiendo de su condición de ídolo musical de las víctimas y, en aprovechamiento de la adoración que éstas le dispensaban, como así también de su inmadurez sexual, las forzó a mantener relaciones sexuales con él en forma violenta e intempestiva, accediéndolas carnalmente por vía vaginal y anal, y a practicarle sexo oral”. “Por su influencia sobre las niñas –agregó el magistrado–, logró manipularlas para que participaran de orgías sexuales que organizaba con otras menores de edad, como así también las incitó a incorporar a otras niñas a dichas prácticas”.
El juez sostuvo además que “se encuentra configurado el riesgo de fuga previsto por el artículo 280 del ordenamiento adjetivo, sin que se advierta la posibilidad de que sea neutralizado por una medida de menor injerencia atendiendo a las razones que se han desarrollado”, y resolvió que “al concurrir en el caso riesgo de fuga, dado por las humillantes características de los hechos pesquisados, así como de entorpecimiento de la investigación, a partir de la incidencia que podría tener el imputado sobre las damnificadas, no habré de acceder a su excarcelación”. Queda pendiente, por parte del juez Ponce, resolver si le dicta o no la prisión preventiva a Aldana. La decisión se espera para los próximos días.
Las mayoría de las denuncias que recaen sobre el músico habían sido presentadas en mayo ante el juzgado por la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres (UFEM), cuando advirtieron la existencia de denuncias públicas realizadas por las víctimas en un perfil de la red social Facebook. Las víctimas denunciaron haber sido violadas por Aldana cuando tenían entre 13 y 16 años. Según informó en ese momento el sitio del Ministerio Público Fiscal, “personal capacitado en violencia de género recibió el testimonio de seis mujeres, quienes relataron situaciones de abuso sexual que sufrieron de manera personal, por parte de Aldana, desde muy temprana edad, y afirmaron que otras niñas habrían sido víctimas de hechos similares”.
El escrito añadió que durante las entrevistas con las jóvenes, “todas las denunciantes afirmaron que se habían animado a contar lo que les había ocurrido a partir de la denuncia pública de una joven contra el líder de otra banda de rock, que se viralizó por las redes sociales”. Se trata de del caso de las dos jóvenes que se denunciaron a José Miguel de Pópolo, cantante de la banda “La ola que quería ser chau”. “Víctimas de Cristian Aldana”, fue el nombre del perfil de Facebook mediante el cual se conectaron las jóvenes que denunciaron al cantante de “El Otro Yo”, para llevar el caso a la justicia en conjunto.
La primera denuncia fue presentada por una ex pareja de Aldana, llamada Carolina, que conoció al músico a los 13 años, él tenía 33, lo vio desde entonces hasta los 16, se mudó con él a los 17 y convivieron durante un año, hasta que terminaron la relación cuando ella tenía 19. Carolina explicó ayer que durante los últimos meses fueron radicadas otras tres nuevas denuncias, que se suman a las siete que ya habían sido presentadas anteriormente en forma conjunta.