“El nivel de afecto que recibí en la visita a España fue tanto que hasta dudé en quedarme ahí a vivir para siempre”, señaló ayer el presidente Mauricio Macri en una entrevista a un diario español a horas de que llegue a la Argentina su par ibérico, Mariano Rajoy. “Son como las de dos amantes que se han vuelto a encontrar. Tuvimos un cortocircuito absurdo de unos años que está resuelto”, aseguró el mandatario al calificar las relaciones diplomáticas con España y agregó que “se dice que segundas partes nunca fueron mejores, pero aunque sea la mitad del recibimiento que tuve valdrá la pena”. Desde la residencia oficial de la Quinta de Olivos, y por si no había quedado claro, Macri afirmó que con Rajoy tenían “una agenda intensa en todos los campos. Espero que me ayude a convencer a los españoles, definitivamente, de que aquí son muy bienvenidos, que ésta es su casa”.