Los festejos de la Nochebuena dejaron un saldo de 67 personas heridas por el uso de pirotecnia y descorches que fueron atendidas en el Hospital del Quemado y en los centros oftalmólogos Santa Lucía y Lagleyze. Con respecto al año pasado, se redujo levemente la cifra de lesionados: en 2015, se habían registrado 74 pacientes en aquellos tres hospitales. La directora del área de Urgencias del Quemado destacó que “de a poco se está logrando que no se utilice tanto la pirotecnia, es todo un cambio de paradigma”. No está claro si el cambio de paradigma es económico. Otra vez, más de la mitad de los heridos fueron chicos menores de dieciocho años.
En tan sólo 365 días, las habituales cifras de heridos por la manipulación de pirotecnia que se registran en el Hospital del Quemado –situado en el barrio de Caballito– variaron notablemente. Entre la Nochebuena y toda la mañana de ayer, fueron asistidas 18 personas que presentaron quemaduras, sin ser ninguna de las lesiones de alta gravedad. En relación al año pasado, la suma de lesionados se redujo a la mitad, ya que habían sido atendidos 36 lesionados. “Para nosotros ha sido óptimo y creo que es por efecto de las campañas por los medios masivos de comunicación y las redes sociales que alertaron sobre los efectos dañinos que causan los fuegos artificiales, sobre nosotros, los animalitos y las personas con autismo”, aseguró Miño.
Por su parte, 28 emergencias oculares relacionadas con el uso de pirotecnia se atendieron en el centro oftalmólogo Santa Lucía. La estadística que sigue preocupando a las autoridades médicas es la referida a la cantidad de menores afectados por los festejos de Navidad. Esta vez, el 60 por ciento de heridos resultó que eran chicos menores de 15 años. “Sigue siendo la pirotecnia lo que más lesiones produce, y si bien vemos una leve tendencia a la disminución desde el 2010, el número de menores de 15 se mantiene estable. Es decir que sigue faltando la prevención en los niños”, informó la jefa de guardia Carola Béccar Varela.
Ubicado en Juan B. Justo al 4151, el Hospital Pedro Lagleyze recibió a 21 personas tras los festejos navideños. Del total de lesionados, 16 fueron a causa del uso de pirotecnia y cinco heridos por corchazos. El jefe de guardia de turno del Lagleyze, Horacio Aguinaga, mencionó que “el caso más grave es el de un chiquito de siete años con estallido ocular”. “El nene estaba jugando con un hermanito con petardos de menor potencia y uno explotó, haciendo saltar proyectiles para todos lados, impactando uno en el ojo. Aún estamos tratando de salvar el ojo”, expuso Aguinaga.
Por último, centros sanitarios de otras provincias también expusieron el tradicional reporte de los lesionados en Navidad por el uso de fuegos artificiales y corchazos. Silvia Marmiroli, subsecretaria de Salud Pública de Rosario, informó que en la ciudad se registraron cinco heridos por pirotecnia, a la vez estableció que “hubo una reducción con respecto a otros años de casos de personas lesionadas”. En cambio, en Córdoba Capital, sólo un paciente debió ser atendido en el Instituto del Quemado de capital provincial.
