Las dos CTA y el gremio de Camioneros vuelven a salir en conjunto a la calle, esta vez con una marcha contra el tarifazo. Convocaron para el jueves que viene a una movilización con velas desde el Obelisco al Congreso, que expresará el rechazo a las violentas subas de los servicios públicos. La protesta fue coordinada con pymes, empresas recuperadas, clubes de barrio, asociaciones de consumidores, un arco de organizaciones que integra las multisectoriales contra el tarifazo.
Hugo Yasky, Pablo Micheli y Pablo Moyano buscan darle así continuidad a su confluencia contra las políticas del gobierno nacional, que comenzó en los meses de las masivas protestas contra la reforma jubilatoria, a fines del año pasado, y siguió con la movilización del 21 de febrero.
“Nos seguimos reuniendo todas las semanas y definimos ahora una serie de acciones. La primera contra el tarifazo, porque es una carga que afecta tremendamente los más pobres y a las clases medias, a los trabajadores y a las pymes”, dijo Micheli a PáginaI12.
La marcha se realizará el jueves 19 a partir de las 19, con una concentración inicial en el Obelisco. Los organizadores tienen la intención de replicar la protesta porteña en otras ciudades del interior y sumarle una movida en las redes. La movilización será antecedida, el miércoles 18, a las 20, por un ruidazo al que convocan las Multisectoriales contra el Tarifazo.
Para la semana posterior, las CTA y Camioneros van a organizar un acto conjunto por el Día del Trabajador –será el 27 de abril, en el microestadio de Ferro–. Micheli señaló que luego tienen previsto continuar con acciones cada 15 días.
La semana pasada, gremios de estos tres sectores hicieron una movida conjunta en la ciudad de Buenos Aires contra el techo salarial del 15 por ciento en las negociaciones paritarias. Sumaron a la Coordinadora de Trabajadores de la Economía Popular y a un grupo de gremios –docentes, judiciales, trabajadores del subte y de la administración pública– que de manera o indirecta cobran sueldos del Estado. Fueron en su mayoría sindicatos de las CTA, más el Sitraju (judiciales porteños, que están en la Corriente Federal, integrante de la CGT). Los recolectores, que son parte de Camioneros, estuvieron en los anuncios de la protesta, pero luego no tomaron medidas de fuerza. Con todo, la jornada mostró la intención de los gremios de la CTA de apostar a una alianza más fuerte con esas organizaciones cegetistas. Los dirigentes piensan en una confluencia a la manera de lo que fue en los ‘90 el MTA liderado por el entonces ascendente Hugo Moyano. “Hay que sostener la unidad en la lucha; a esto hay que darle un programa y, si se puede, una orgánica”, apuntó Eduardo López, dirigente de la CTA de los Trabajadores, conducida por Yasky.
En la rueda de prensa de ayer en el Hotel Bauen hubo representantes de las pymes y de las empresas recuperadas, dos sectores ahogados por el aumento de las tarifas.
“Nos están llegando facturas de electricidad con aumentos del 600 por ciento”, denunció Eduardo Montes, de la Cooperativa Gráfica Patricios. “Para nosotros, una suba gradual podía llegar a ser manejable, pero este aumento desbocado de los servicios más la apertura de las importaciones, más las devaluaciones, es un combo explosivo. No hay forma de trasladar el precio a los clientes. Cientos de cooperativas quedamos en riesgo de cierre.”