La Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro comenzará este lunes lo que definieron como un “plan de medidas de autodefensa” tras un cierre perjudicial de la paritaria que llevó adelante la UTA. El plan arranca el lunes con apertura de molinetes en la cabecera San Pedrito de la línea A entre las 7 y las 9.
“Si no hay respuesta del gobierno porteño haremos paro el martes”, dijo a este diario Enrique Rositto, vocero de los empleados del subte. En caso que no se los convoque, el martes parará la línea A de 5.30 a 7.30, esto es, en las dos primeras horas de servicio, antes de la mayor afluencia de usuarios.
“La idea es hacer un gran paro con repercusión mediática y que tenga el menor impacto posible en los pasajeros”. Si después del martes sigue sin haber novedades, será el turno de la línea B que sucederá el miércoles con apertura de molinetes en la cabecera Juan Manuel de Rosas, y luego está programado un paro de esa línea para el jueves entre las 5.30 y las 7.30, el mismo horario del paro previsto en la línea A dos días antes.
De esta manera, los metrodelegados sientan posición luego de rechazar un acuerdo que el viernes firmó la UTA que conduce Roberto Fernández con la Subsecretaría de Trabajo de la Ciudad y que abarca un aumento del 15,2 por ciento en tres tramos. “Nosotros pedimos el nueve por ciento de recomposición por la pérdida de poder adquisitivo durante el año pasado y un 25 por ciento más en previsión de la inflación que la propia Ciudad considera que habrá este año”, puntualizó Rositto. Las medidas de protesta se extenderán a las otras cuatro líneas y al premetro si no se retoma el diálogo.
El gobierno porteño acordó con UTA a la que consideró como único gremio representante de la totalidad de los trabajadores de subterráneos aprovechando el fallo de la Corte Suprema de Justicia que derogó la personería gremial que ostentaba la Agtsyp.
El titular del metrodelegados, Roberto Pianelli, aseguró que “la intención no es afectar al usuario sino provocar que los funcionarios recapaciten. Fernández y el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, deben saber que los trabajadores de la Agtsyp no están dispuestos a que les reduzcan el salario". El dirigente desmintió que los trabajadores de subterráneos y el Premetro vayan a percibir ese 15,02 por ciento de mejora salarial porque en realidad "se trata de un 13 por ciento, porque es un incremento anual al que habrá que prorratear el total de lo percibido en 13 meses", y puntualizó además que "el último tramo del 5 por ciento se cobrará recién en enero de 2019", indicó.