Ferrari lanzó ayer un nuevo aviso a Mercedes: el alemán Sebastian Vettel consiguió la “pole position” del Gran Premio de Fórmula 1 de China y compartirá hoy –a las 4 de la mañana, hora de la Argentina– la primera línea de la parrilla con su compañero de escudería, el finlandés Kimi Raikkonen.
Vettel, líder del campeonato del mundo, le arrebató la “pole” a Raikkonen en el último suspiro al completar el circuito de Shanghai en 1’31.095 minutos. El finlandés perdió la primera plaza por apenas 87 milésimas.
Mucho más, medio segundo, separó a los Ferrari de los Mercedes. El finlandés Valtteri Bottas fue tercero, a 0.530 segundos de Vettel, mientras que el británico Lewis Hamilton sólo pudo ser cuarto, a 0.580 del mejor tiempo.
Vettel buscará hoy su tercera victoria consecutiva tras ganar los dos primeros Grandes Premios de la temporada, en Australia y Bahréin. Si suma un nuevo triunfo, podría abrir ya una brecha importante respecto a Hamilton en la lucha por el título mundial.
El alemán, que celebró ayer la “pole” número 52 de su carrera lidera actualmente la clasificación con 50 unidades, mientras que Hamilton es segundo a 17 puntos.
La escudería Mercedes fue la gran dominadora del circuito de Shanghai en los últimos años: entre 2012 y 2017 ganó cinco carreras y sólo se le escapó la victoria en 2013, cuando triunfó el español Fernando Alonso a bordo del Ferrari. Ello, unido a la gran jornada de entrenamientos que tuvo Hamilton el viernes, colocaban al equipo alemán como favorito para la clasificación. Pero no fue así.