Los crímenes de lesa humanidad sucedidos en España y Marruecos durante el franquismo llegaron a la Cámara Federal de Casación Penal. La Sala IV fijó para fines de mayo la audiencia en la que oirá a las partes vinculadas con dos víctimas cuyos familiares solicitaron sin éxito a la jueza que lleva a cabo la investigación, María Romilda Servini de Cubría, ser querellantes en la causa. El expediente llegó ayer a Casación y ayer mismo el presidente de la Sala IV, Mariano Borinsky, programó para el 30 de mayo la audiencia en la que él y sus colegas Juan Carlos Gemignani y Gustavo Hornos oirán a los querellantes.
Uno de los casos que evaluará Casación es el de Rubén Benedicto Salmerón, cuyo abuelo fue detenido, torturado y desaparecido en Marruecos durante el franquismo. Hace poco más de un año que Benedicto Salmerón pidió a Servini de Cubría –a través de Máximo Castex y sus abogados patrocinantes– ser querellante en la causa que investiga los crímenes de lesa humanidad cometidos en España durante la dictadura de Francisco Franco. A principios de febrero pasado, la jueza federal rechazó el pedido porque los hechos que había sufrido el abuelo del “pretenso querellante” habían sucedido en Marruecos. La querella apeló la decisión ante la Cámara Federal de Apelaciones, que opinó igual que Servini de Cubría pero con otros argumentos: la Sala II de la Cámara Federal consideró que para ser querellante era necesario “un plus de argumentación” en cuanto a la calificación o a la naturaleza jurídica de los crímenes que se investigan en la causa.
Castex consideró “erróneos” ambos argumentos y recurrió a Casación. “La médula de esta causa es la jurisdicción universal, lo único que importa es la naturaleza jurídica de los crímenes, delitos de lesa humanidad, no la nacionalidad de los actores”, explicó y completó que “en la causa está acreditado que el plan sistemático se pudo haber cometido en distintos países. Dejar afuera a una víctima por el territorio en el que sucedió el hecho que sufrió generaría desigualdad”. En cuanto al argumento usado por la Cámara Federal de Apelaciones, el abogado apuntó que el “plus de argumentación” que exigió la Sala II “no es un requisito formal”.
Además del de Benedicto Salmerón, Casación analizará el pedido de los familiares de otra víctima que quisieron constituirse en querellantes y Servini de Cubría los rechazó. Se trata de la madre y la hermana de un joven de 17 años que fue asesinado tras las elecciones libres en España de 1977.