Tres policías acusados de encubrir la desaparición de la sanlorencina Paula Perassi seguirán en prisión domiciliaria. La Cámara Penal rechazó ayer el pedido de libertad de Jorge Krentz, María José Galtelli y Aldo Gómez. Se trata de tres de los cinco uniformados en la causa que tiene como principal acusado al empresario Gabriel Strumia, quien tenía una relación extramatrimonial con la víctima, desaparecida desde septiembre de 2011. La hipótesis de la fiscalía y de la familia de Paula es que la mujer fue obligada a realizarse un aborto y que falleció el mismo día de realizárselo. Su cuerpo nunca apareció.