El Partido Liberal y el Frente Guasú, conglomerado de movimientos de izquierda, reeditan la alianza que los llevó al poder en 2008. Pero a diferencia de entonces, cuando la encabezó Fernando Lugo (del Frente Guasú), esta vez el candidato a presidente es el liberal Efraín Alegre y su compañero de fórmula, Leo Rubín, representa a la izquierda. O sea, los liberales se asegurarían un poder mayor.
Entre ambos sectores buscan darse una nueva oportunidad después de que en 2012 los liberales apoyaran la destitución de Lugo. Del otro lado de la línea, se escucha una voz conocida para los oyentes de radio en Paraguay. El candidato a vicepresidente por Gran Alianza Nacional Renovada (Ganar) señala a Páginai12 que él fue uno de los pocos periodistas que llamó “golpe parlamentario” al juicio político exprés contra Lugo desde su programa en radio Ñandutí.
Leo Rubín afirma con pragmatismo que “hay que ver el bosque y no el árbol: separados no vamos a podemos ganarle al Partido Colorado”. Y que se firmaron ejes programáticos, de los que el comunicador destaca en primer lugar la recuperación de la gratuidad en la salud. “Queremos reivindicar lo que hicimos con Lugo, recuperar la salud básica gratuita. Creamos 700 unidades de salud de la familia en los barrios y en el interior y esperamos llegar a 1500. Cartes tan solo agregó 120”, dice en referencia a lo que hizo el actual presidente colorado.
Rubín enumera otras propuestas de su alianza que contrastan con las políticas del gobierno saliente. “Planteamos reducir la tarifa de energía, hoy en día es muy alta. Que el 30 por ciento más humilde pague un dólar al mes en lugar de 10 dólares la tarifa de luz. Macri y Cartes firmaron un acuerdo sobre Yacyretá en el que se nos endilga una deuda y nosotros decimos que hay que revisarlo. Vamos a rechazar el acuerdo, que aún debe pasar por el Congreso”.
Asimismo, el candidato a vice propone un cambio de la Justicia, dado que “está corrompida y partidizada”.
El crecimiento de la economía paraguaya ha sido considerable en los últimos años: para 2018 se espera un crecimiento del 4 por ciento. Pero la pobreza -un 28 por ciento- es uno de los principales problemas del vecino país. Leo Rubín afirma que Ganar apostará a la inversión en lo social. Y critica a este gobierno. “Cartes gobernó como si fuera una empresa, con un gabinete de gerentes paralelo. Ellos tienen mirada de empresario, nosotros tenemos una mirada social. Por ejemplo, planteamos que se aumente el impuesto al tabaco, en Paraguay es del 16 por ciento, demasiado barato, que pase a un 40 por ciento. Cartes se ha opuesto porque es uno de los principales fabricantes de cigarrillos”.
También su alianza plantea reinstalar el tema de la reforma agraria. Rubín señala que la concentración de las tierras en pocas manos son una herencia de la dictadura de Stroessner. “Hay unas 8 millones de hectáreas mal habidas. Aquí se regalaron tierras a los militares, a los amigos de la dictadura”.
Se le pregunta a Rubín sobre el candidato presidencial “Marito” Abdo Benítez y su vínculo familiar con Alfredo Stroessner. Su padre, Mario Benítez, fue secretario privado del dictador. “El candidato colorado dijo que va a `colorizar` el país, eso es propio del stronismo. Va a ayudar solamente a intendentes y gobernadores colorados”.
En marzo de 2017 se produjo un sisma político por el debate de un proyecto de enmienda constitucional que hubiera habilitado la reelección presidencial. Ese proyecto generó divisiones al interior de los partidos tradicionales (liberales y colorados) y provocó hasta la quema del Congreso y la muerte de un militante liberal. En lo personal Rubín dice que está a favor de una reforma constitucional. “Efraín Alegre no va a buscar la reelección directa. Sí se podría plantear una reelección con alternancia, como en Chile o Uruguay”.
A propósito de la decisión de Paraguay de retirarse de la Unasur, en sintonía con sus vecinos del Mercosur Argentina y Brasil, Rubín es categórico. “Es un tema de Estado y debería haber un consenso en Paraguay de los partidos sobre Unasur. Un presidente que se está yendo en tres meses no debería tomar este tipo de decisiones unilaterales. Unasur tendrá sus problemas, pero irse del bloque es un error”.
A todo esto, el candidato a vicepresidente lamenta la detención del ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva. “En lo personal pienso que Lula sufre las consecuencias de haber sacado a 40 millones de brasileños de la pobreza, de haber hecho transformaciones. Buscan frenar su victoria, atacan su candidatura a presidente. Como periodista conocí el expediente y no hay nada para incriminarlo. Nada para humillarlo así”.
Rubín cierra la charla reflexionando acerca de la destitución de Dilma Rousseff. “Paraguay fue una prueba de laboratorio con el juicio político contra Lugo, después vino el de Dilma”.