La automotriz General Motors anunció que suspenderá las actividades de su planta de la localidad de Alvear, Santa Fe, por diez días a partir del viernes 27 de abril, retomando las tareas el lunes 7 de mayo. A través de un comunicado, la firma justificó la paralización de la producción durante ese período “con el objetivo de adecuar el volumen de producción a las fluctuaciones del mercado”. Concretamente, la necesidad de reducir la producción estaría vinculada a la caída de ventas previstas a Brasil de cinco mil unidades, según fuentes gremiales. La planta de Alvear trabaja en dos turnos, en los que se desempeñan 1500 empleados. Una de las versiones circulantes es que la intención de la terminal sería reducir las tareas a un solo turno. La decisión de General Motors se suma, así, a las medidas de ajuste aplicadas en la última semana por otras dos grandes corporaciones internacionales en sus filiales locales: Cargill, que suspendió las actividades en dos plantas, y Carrefour, que firmó un procedimiento de crisis para convalidar mil retiros en lo inmediato y amenaza con despidos y cierres de sucursales dentro de los próximos tres años.
General Motors informó este fin de semana que, “con el objetivo de adecuar el volumen de producción a recientes fluctuaciones de mercado, la planta suspenderá actividades del viernes 27 de abril al viernes 4 de mayo, retornando a la actividad normal el lunes 7 de mayo”. Según fuentes gremiales, la empresa pagará los días de suspensión de actividades a sus operarios aunque no concurran a la planta de la localidad de Alvear, ubicada 25 kilómetros al sur de Rosario. La decisión le había sido adelantada el viernes a la representación gremial de los trabajadores.
La noticia puso en alerta al Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata). “Tememos que atrás de esto se quiera reducir personal”, dijo el secretario general de la seccional Rosario, Marcelo Barros, en declaraciones a la prensa. Añadió que la preocupación gremial se centra en que la automotriz reduzca la producción a un solo turno de trabajo. El dirigente de Smata explicó que fuentes de la empresa le habían confiado que “se cayeron 5.000 unidades de ventas a Brasil”. Ese es el principal destino del Chevrolet Cruze que se produce en la planta santafesina de GM.
El breve comunicado de la compañía no brinda precisiones sobre su situación, aunque relaciona la suspensión de actividades con la necesidad de “adecuar el volumen de producción a recientes fluctuaciones de mercado”, lo cual se condice con la información comentada por el titular de la seccional rosarina de Smata.
Germán Tonero, delegado de planta, corroboró lo señalado por Barros y sumó algunos detalles. “La empresa comunicó al gremio que va a parar cinco días su producción, del 27 de abril al 4 de mayo. Argumenta que se cayeron 5 mil unidades de venta a Brasil y por eso suspende al personal, pero también plantea una reducción de personal porque quiere quedarse con un solo turno de los dos que existen”, advirtió en diálogo con el portal local Rosarioplus.com. Tonero contó que, en las últimas semanas, hubo repetidos casos de jornadas con trabajo suspendido. “La intención de suspender la producción ya se rumoreaba, hace semanas que venimos con suspensiones en días puntuales: avisan el día anterior que no se vaya a trabajar el día siguiente, dicen que por falta de piezas o piezas defectuosas”, relató.
Para el representante gremial de planta, la batalla más dura que tienen por delante es evitar la reducción de turnos. Hoy hay dos turnos, entre los cuales se reparten casi 1500 trabajadores. “Decir que quieren reducir todo a un turno es decir que quieren recortar empleos”, remarcó en la misma entrevista. “El sindicato ha levantado varios reclamos por irregularidades en la fábrica. En la línea de producción falta gente y se nota, porque cuando alguien tiene que irse a otra tarea no puede, porque nadie los cubre”, enfatizó. El martes próximo habrá una audiencia en el Ministerio de Trabajo, en la que General Motors formalizará la decisión de paralizar la planta entre el 27 de abril y el 7 de mayo.
La producción del año pasado en la planta de Alvear superó las 50 mil unidades. Su actividad principal pasó a ser la producción del modelo Chevrolet Cruze, tanto para el mercado interno como para la exportación, que tiene como destino principal y casi excluyente a Brasil. Según fuentes de la misma empresa, todas las unidades que salieron hacia el país vecino en lo que va del año permanecen en stock de la filial de GM en ese país, ya que no hay demanda para absorberla. Esta situación es la que habría motivado la decisión de parar por diez días la actividad en la planta santafesina.
Tampoco se sabe cómo evolucionará la demanda brasileña de aquí en adelante. Es por eso que los temores gremiales de que exista la idea de reducir a un solo turno la actividad de la planta (originalmente eran tres) no son infundados. “La recesión de Brasil tuvo un impacto muy fuerte sobre toda la industria argentina, y aunque se afirme que en el último año y medio o dos años hubo una recuperación, el nivel de ventas manufacturadas con ese destino nunca se recuperó”, indicó una alta fuente empresaria ayer a PáginaI12. “Lo que pasa con General Motors no es diferente a lo que estamos viviendo en otros sectores que esperaban con expectativas el repunte de Brasil, que por lo menos a nivel de nuestras industrias nunca ocurrió”, completó.