Desde la llegada de Mauricio Macri al gobierno, las emisiones de deuda totalizaron 142.948 millones de dólares. De ese total, el Tesoro Nacional emitió 118.071 millones, las provincias 12.336 y las empresas privadas 12.541 millones. En el mismo período se fugaron 88.084 millones de dólares (ver aparte), salida que supera toda la emisión en moneda extranjera del tesoro nacional, la cual se eleva a 75.832 millones. Los datos surgen del relevamiento que todos los meses lleva adelante el Observatorio de la Deuda Externa de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (ODE-UMET). “Ante la delicada situación en el frente externo y el persistente déficit de la balanza comercial, la dependencia en el financiamiento externo se torna cada vez mayor: se requerirá de un flujo constante de dólares que ingresen a la economía para poder hacer frente a los crecientes pagos de deuda”, advierte el informe.
Argentina es el mayor emisor de deuda soberana para el período 2016-2018 cuando se lo compara con sus pares emergentes en lo que hace a emisiones de deuda en moneda extranjera. De hecho, desde diciembre de 2015 colocó deuda por valores que duplican al segundo país emergente.
La emisión de deuda es el principal salvavidas que hasta el momento encontró el gobierno para mantenerse a flote mientras el déficit de la cuenta corriente de la balanza de pagos se profundiza. De los 141.948 millones de dólares emitidos por Argentina durante el gobierno de Macri, el 83,2 por ciento corresponde al Tesoro Nacional. A su vez, de esos 118.071 millones, 59.454 se emitieron en moneda extranjera y bajo legislación extranjera, el 50,3 por ciento del total.
La deuda colocada en dólares con legislación extranjera sumó 22.051 millones en 2016 y 28.413 millones en 2017 y 9000 millones en enero de este año. De esos 9000 millones, emitió 1750 millones con vencimiento el 11 de enero de 2023 (plazo a 5 años), 4250 millones con vencimiento el 11 de enero de 2028 (plazo a 10 años) y 3000 millones que vencen en 2048 (plazo de 30 años). Los cupones fueron de 4,625 por ciento, 5,875 y 6,875 por ciento, respectivamente.
Además, en lo que va de la gestión Cambiemos a los 59.454 millones emitidos en dólares bajo legislación extranjera se le debe suman un stock acumulado de Letes en dólares bajo legislación local por 16.368 millones a un plazo promedio de 318 días, de los cuales 5350 millones se emitieron en lo que va del año. De ese modo, la deuda en dólares se eleva a 75.832 millones.
En endeudamiento acrecienta la vulnerabilidad. “Argentina tiene problemas estructurales generados por la política económica iniciada en 2015 por el gobierno de Mauricio Macri que tienen consecuencias económicas, productivas, financieras y sociales. La deuda externa –en ese marco– es un recurso efímero en el largo plazo y sus consecuencias son imprevisibles. Con una deuda que se emite para financiar transitoriamente los desajustes fiscales y básicamente el creciente déficit comercial externo, sin intervención estatal en contrario no hay sustentabilidad posible”, aseguró a PáginaI12 Arnaldo Bocco, director del Observatorio de la Deuda Externa y Director en UMET del Departamento de Economía. A su vez, el economista agregó que “eso se agrava con la enorme fuga de capitales. Lo que ingresa por un lado acelera la puerta giratoria que facilita al mismo tiempo la fuga al exterior de los dólares atesorados o la remisión de las rentas fuera del país. No tiene destino esta política y menos aún si hay especulación e inflación.
Vencimientos
Este creciente endeudamiento está trayendo como consecuencia un peso cada vez más significativo del pago de intereses. El informe de UMET destaca que en marzo el Tesoro Nacional enfrentó vencimiento de intereses de la deuda en moneda extranjera por 371 millones de dólares, donde 256 millones se debieron al pago de títulos públicos y 104 millones al pago a organismos internacionales.
Asimismo, el tesoro también debió abonar en marzo vencimientos de capital en moneda extranjera por 279 millones, de los cuales 261 millones se destinaron al pago a organismos. El total de desembolsos en marzo, entre capital e intereses, sumó 650 millones de dólares.
Por su parte, en abril se abonarán 2996 millones de dólares (1900 millones por Letes, 906 millones por pago de intereses y 189 millones por pago de capital).
Para todo 2018 se estiman vencimientos de deuda del Tesoro Nacional en moneda extranjera por aproximadamente 17.029 millones de dólares, donde 9428 millones de dólares corresponden a intereses y 7601 millones de dólares a pagos de capital. Si además se incluyen los vencimientos de Letes (14.618 millones de dólares), entonces los vencimientos totales ascienden a 31.647 millones de dólares. Si no se tuviesen en cuenta los vencimientos de Letes del Tesoro en dólares, entonces los vencimientos en el 2022 (por aproximadamente 29.082 millones de dólares) resultarían los más abultados del período 2018-2047; caso contrario, 2018 resultará el más exigente en lo que hace al repago de la deuda.
El año con mayores desembolsos por el pago de vencimientos de deuda en pesos será 2019 (por 20.116 millones de dólares) si no se tiene en cuenta el pago de Letes en pesos, y si se tiene en cuenta el pago de Letes será 2018 con 24.922 millones de dólares.
Si se combina el perfil de vencimientos anual de la deuda nacional en moneda extranjera con la el perfil en moneda local para obtener los vencimientos totales, se concluye que 2019 será el año en el que se deberán enfrentar los vencimientos más altos (42.379 millones de dólares) y, si se incluyen las Letes del Tesoro en dólares y pesos, lo será 2018 (56.568 millones de dólares).
En promedio para todo el período 2018-2040, el 62,1 por ciento de los vencimientos son con el sector privado, el 28,4 por ciento con el Sector Público y el 9,5 por ciento con organismos multilaterales y bilaterales. “Esto complica fuertemente el panorama económico argentino dado que son este tipo de vencimientos los que conllevan mayores riesgos de refinanciación”, destaca el informe de la UMET.
“Si continúa el endurecimiento de la política monetaria de las principales economías mundiales y el encarecimiento en el costo de financiamiento internacional, se corre el riesgo de que nuestro país no logre pedir prestadas las divisas necesarias para honrar sus compromisos de deuda. Una situación de este tipo desencadenaría en una acelerada fuga de capitales del país y en la mega devaluación del peso argentino, con consecuencias sociales ya conocidas”, advierte la UMET.
