“Todos somos Milagro” comenzó a producirse pocos meses después de que la líder de la Tupac Amaru, Milagro Sala, fuera detenida en el penal de Alto Comedero, en Jujuy. Las fotógrafas María José Malvares y Gimena Tur comenzaron entonces a tomar el hoy icónico retrato que Sebastián Miquel realizó de Sala, doblarlo a la mitad, y fotografiar, con esa media imagen sobre los rostros, a una multiplicidad de referentes de los más diversos espacios del campo nacional y popular. “Todos acá esperamos la libertad de Milagro Sala y de todos los presos políticos en Argentina”, afirmó ayer Nicolás Trotta, rector de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET) y director de la Editorial Octubre, al presentar la obra junto a la abogada de Sala, Elizabeth Gómez Alcorta. “Esta obra es colectiva en el sentido más hermoso de la palabra, es –definió la abogada– un legado colectivo como no podría haber sido de otro modo tratándose de Milagro. Y es el legado de una época difícil, hostil, que trabaja en contra de lo colectivo, que lo criminaliza.” A la presentación asistieron también la Madre de Plaza de Mayo Taty Almeida, la ex ministra de Cultura Teresa Parodi y el ex secretario Legal y Técnico, Carlos Zannini, entre otros.
“La campaña surgió por la necesidad de visibilizar lo que estaba sucediendo: que habían cazado a Milagro pero que venían por todos”, relató Malvares, quien le llevó la idea a Trotta junto a su compañera. Minutos antes, Tur había leído uno a uno los presos políticos “de la era macrista”.
Hasta hace poco, Zannini integraba esa lista. Ayer, estuvo presente entre el público que presenció las exposiciones y fue el más aplaudido. “Tenemos la suerte de tenerlo entre nosotros al compañero Zannini, imprescindible para esta lucha”, apuntó Parodi, encargada de dar la bienvenida y dar por comenzado el encuentro en el Instituto Patria, “la casa que nos ha permitido seguridad soñando y militando la patria que nos merecemos”.
Trotta, Gómez Alcorta y Almeida hablaron luego de la música en vivo de Ramiro Abrevaya. El titular de la UMET y director de la Editorial Octubre encuadró la publicación de “Todos somos Milagro” en “la apuesta por la educación, la organización, y la cultura como herramienta de transformación colectiva” que desarrolla el Sindicato Único de Trabajadores de Edificios de Renta y Horizontal (Suterh). “La posibilidad de que todas esas herramientas las tengan los trabajadores no fue magia. Y cada vez más son más los que la extrañan a esa Argentina”, resaltó Trotta. “La universidad y la editorial no son espacios neutrales para nosotros. Nuestra agenda es la del sector trabajador”, completó.
Gómez Alcorta consideró la obra editada por Editorial Octubre como “un legado de esta época difícil, hostil, que trabaja en contra de lo colectivo”. “Milagro es la gran bruja, la gran subversiva del siglo XXI, es esa gran otredad negativa amenazante que presenta el Estado jujeño misógino, conservador, machista –continuó la abogada–. Esta obra colectiva hace que esa otredad negativa amenazante diga algo muy importante: que todos ponemos la cara y el cuerpo, porque cuando tocan a uno tocan a todos. Eso es disputarle el sentido al neoliberalismo”.
La Madre de Plaza de Mayo llegó al encuentro cuando la abogada y el rector universitario habían culminado sus exposiciones. Destacó el encuentro “con personas que demuestran tener la memoria que Macri pretende borrar” y se alegró de “ser cada vez más las personas que resistimos”. Previo a sus palabras, la cantante Liliana Herrero alzaba una foto de Mirta Guerrero, conocida como “Shakira”, una de las militantes de la Tupac que permanece detenida en la prisión de Alto Comedero. “Está pasándola mal, está mal atendida y muy triste”, contó Herrero. Shakira fue operada varias veces en el hospital zonal. “Para que Shakira y todos los presos políticos sean libres hay que estar juntos. Si lo hacemos de manera individual, nos van a ganar”, insistió. Luego, se puso a cantar.