"En esta época en que aparentemente todo vale cualquier cosa o todo vale todo, llega a mí este texto de Nelson Valente, sugerido por un amigo teatrero de Venado Tuerto en tono de comedia", dice el director Eduardo Ceballos refiriéndose a El Loco y la camisa, obra que dirige y que se estrena el próximo viernes a las 21, en la Sala del Rayo Misterioso (Salta 2991).
"Cuando empiezo a leerlo y analizarlo para tomar la decisión de hacerlo me encuentro con que el anuncio del género se transforma en la realidad que desde algún lugar estamos viviendo socialmente: la hipocresía", dice este prolífico director y maestro de actores.
"Hace poco hice El dolor de la memoria, de Julián Iribarne, y planteé algo similar: que a veces a los gobernantes no les conviene que digan tal o cual verdad; por eso los tratan de locos y los encierran", reflexiona Ceballos.
La obra transcurre en el seno de una familia de clase media que cuando parece articulada, aparece el Loco sacando un as de la manga y desarma todo. "Nada le pueden refutar porque es verdad, entonces metafóricamente lo encierran porque el padre le ordena encerrarse en su habitación; creo que es un texto que marca una vez más que una realidad planteada a través de una farsa,sátira o comedia como en este caso, cala mucho más hondo".
El elenco está integrado por Graciela Ortiz, Nadia Lewandowski, Carlos Pellegrino, David Fiori y Hernán Olazagoitía, con el aporte en la dirección de arte de Lorenza Salvaggio; filmaciones y fotografías a cargo de Hugo Bruschini; la gráfica es de Ludmila Almoualem y Ana Lentini como asistente de dirección.
