El temporal que azotó al Área Metropolitana durante la madrugada del domingo provocó múltiples daños en distintos lugares. En el caso del aeropuerto de El Palomar puso en evidencia la fragilidad de las instalaciones que el Gobierno montó allí para que Flybondi pudiera desarrollar su negocio. El agua se filtró por las luces del techo de la precaria terminal que luego cedió mientras los pasajeros esperaban en el lugar para abordar un vuelo finalmente cancelado. No sería el único vuelo cancelado por la low cost el domingo sino que cerca de 1500 fueron afectadas por un total de 7 cancelaciones tras el temporal. Además, desde la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico denunciaron que ese mismo día el avión de la empresa low cost que voló por la noche desde Bariloche hasta Buenos Aires realizó el trayecto con fallas en sus sistemas hidráulicos.
Desde su transformación en aeropuerto comercial la lluvia ha sido un problema en El Palomar porque su pista no es la mejor para operar en esas condiciones climáticas y eso obligó más de una vez a reprogramar vuelos o derivarlos a otras aeroestaciones. En la terminal los inconvenientes no habían pasado de alguna que otra gotera, pero esta vez las cosas se complicaron.
La filtración de agua a través de las luces del techo fue el primer indicio de que las instalaciones no resistirían una tormenta de esa magnitud. Personal del aeropuerto puso baldes para paliar la situación, pero nada pudieron hacer después cuando directamente cedió parte del techo.
Las personas que estaban en el lugar también dieron cuenta de que en un momento, aparentemente por las filtraciones de agua, se produjo un fogonazo en la instalación eléctrica y la terminal quedó sin luz. El servicio se reestableció luego sólo en parte del aeropuerto.
Especialistas en materia aeronáutica remarcaron que la Administración Nacional de Aviación Civil no tiene en El Palomar el personal terrestre que corresponde a cada aeropuerto y que debería haber activado el protocolo de Alerta Meteorológico. Eso hizo que los daños fueran mayores.
Los inconvenientes provocados por la tormenta llevaron a que Flybondi reprogramara el vuelo FO5240 que debía salir a las seis de la mañana con rumbo a Bariloche. La empresa anunció que partiría a las nueve, pero un rato después anunció su cancelación y los pasajeros se quedaron sin poder viajar. El argumento de la cancelación fue que las condiciones climáticas impedían volar, pero a esa misma hora en Ezeiza y Aeroparque los aviones salían ya sin inconvenientes.
El vuelo FO5240 no fue el único vuelo del domingo cancelado por FlyBondi sino uno más de una larga lista:
- A las 7.40, el vuelo FO5000 de Flybondi debía arribar en Córdoba desde El Palomar, pero fue cancelado. El vuelo FO5003 estaba previsto para partir de Córdoba hacia El Palomar a las 8.10, no ocurrió.
- En Mendoza, el vuelo FO5460 debía salir a las 7.35 para arribar a Bariloche a las 9:15, pero no lo hizo.
- En Bariloche, el vuelo FO5461 que cubría la ruta de vuelta a Mendoza a las 9.45 también quedó sin cubrir el servicio.
- De vuelta en Córdoba, a las 12.50, el vuelo FO5405 debía aterrizar en la capital cordobesa proveniente de Mendoza. Pero esa ruta también fue cancelada.
- Más temprano, a las 7.05, el vuelo FO5400 tampoco había arribado a la pista mendocina proveniente de Córdoba.
Desde la empresa aseguraron que estos vuelos fueron cancelados con anterioridad al temporal y también salieron al cruce del titular de la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico, Ricardo Cirielli, quien denunció ese mismo día un avión de Flybondi voló sin estar en condiciones de hacerlo. “Este domingo partió un vuelo a las 21:19 hs desde el aeropuerto de Bariloche rumbo al aeropuerto de El Palomar. Con fallas en ambos sistemas hidráulicos, no tenía personal técnico habilitado y tampoco hubo presencia de las autoridades aeronáuticas”, consignó el sindicalista en su cuenta de Twitter. La compañía aérea lo negó.