El Sindicato de Aceiteros de Rosario se manifestó ayer en la Plaza de la Madre de Villa Gobernador Gálvez. En el Día del Trabajador, los operarios marcharon por las calles para pedir la reincorporación de 33 despedidos de la planta de Cargill y también de Punta Alvear y de Bahía Blanca. Si bien en un principio estaba previsto que el acto se realice frente a la fábrica, por el mal tiempo decidieron concentrarse en el Club Talleres de VGG donde hubo un festival y almuerzo solidario, para recaudar dinero para el fondo de huelga de los aceiteros.

Los trabajadores de Cargill debían cobrar sus sueldos el jueves pero "la empresa pagó mucho menos del 50 por ciento de lo que corresponde ala mayoría de los compañeros, lo cual interpretamos como un acto extorsivo para que desistamos de la lucha, y esto lo vamos a denunciar en el Ministerio de Trabajo", advirtió el delegado gremial Marco Pozzi.

"No sabemos si se va a lograr lo de Cargill. Por el momento hay acampe frente a la planta sin otra medida de fuerza. Es una gran tristeza ver cómo el capital está avanzando sobre las fuerzas de trabajo", dijo Sergio Díaz, secretario general del Sindicatos de Aceiteros de Rosario.

El gremialista también dijo que "hay un adormecimiento por parte de la sociedad que no está enfrentando a las políticas del gobierno nacional que está tratando de quitarle a los trabajadores sus derechos ganados", haciendo alusión al proyecto que el Ejecutivo nacional propuso y que busca modificar los topes de indemnización. "Tratando así de sacar aguinaldos y premios, entre otras cosas", agregó Díaz.

Por su parte Raúl Daz, de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) consideró: "Es un día de lucha, reflexión y movilización, sobre todo teniendo en claro el ataque feroz de las políticas del gobierno hacia los trabajadores. Por eso es un día para estar movilizados y en completa solidaridad con los trabajadores de Cargill, una empresa que en 2017 obtuvo 53 mil millones de pesos de ganancia".

A su turno la secretaria general de Coad, Laura Ferrer Varela calificó el encuentro como "este acto es muy importante, la unidad es la única forma en que vamos a poder salir adelante".

En tanto Octavio Crivaro, referente del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS), dijo: "Nos oponemos a que el 1º de Mayo sea tomado como día de fiesta. Es un día de lucha y éste más que nunca porque no sólo está la situación de Cargill sino también la de Mefro Wells y Vasalli, entre otras fábricas e industrias que despiden a sus empleados. Hay una preocupación muy importante por los puestos de trabajo en la región y en un marco del plan del gobierno de Mauricio Macri de continuar con los ataques contra los trabajadores".