El logo de la Cía. Tierras Sud Argentino S.A. del magnate italiano Luciano Benetton está en la puerta de su estancia, aparece bordado en la campera de su capataz Ronald Mac Donald, y también en el Cuartel Forestal Leleque, donde funciona una comisaría de la policía de Chubut. Por estas horas los mapuches de la contigua comunidad en Resistencia de Cushamen ni siquiera se preguntan ante quién podrían denunciar el nuevo ataque, ya no creen en las instituciones del Estado y el miércoles a la noche, según alertaron, sufrieron el accionar conjunto de policías y empleados de Benetton que prendieron fuego a la casilla de guardia, ubicada a pocos metros de la ruta 40 y del río Chubut, donde desapareció y murió Santiago Maldonado. “El incendio de la casilla de guardia no sólo atenta contra la causa de Santiago sino también contra el caso donde la comunidad es querellante porque hoy se iba a realizar una planimetría para demostrar cómo la policía de Chubut había ingresado y tirado a matar a sus miembros el 11 de enero de 2017”. Desde la Patagonia así explicó a PáginaI12 la abogada Sonia Ivanoff el trasfondo del episodio en el que esa humilde construcción de madera, chapa y nylon ardió en llamas. Fue allí donde Maldonado había dejado su mochila , antes de correr hacia el río perseguido por las balas y las piedras de los gendarmes. El lugar fue el escenario de aquel operativo represivo y a pocos metros fue encontrado el cuerpo sin vida del tatuador. El juez federal Gustavo Lleral no dispuso custodia alguna del predio, que quedó preservado desde aquel día por los propios habitantes, hasta anoche.
“Los peñi y las lamien estaban en la guardia cuando entró una camioneta, nos empezaron a correr a los tiros y luego prendieron fuego la guardia”, relató uno de los peñi, quien afirmó que eran policías y empleados de la estancia Leleque, propiedad de Benetton. El martes ya habían intentado ingresar al predio, pero fueron repelidos con hondas de revoleo. “Emilio, Fausto, Fernanda y Malvina, de la comunidad acusan, entre otros, al imputado jefe de la brigada de investigaciones de la policía de la provincia de Chubut, el oficial Julio Solorza, por los sucesos de enero. Mañana (por hoy) había que hacer esa prueba tan importante, a las 10, con peritos de parte y de la policía. Y el lunes el 7 es la audiencia preliminar en el caso de Benetton contra la comunidad por usurpación. Lamentable es un accionar y hostigamiento permanente entre la policía de Chubut y la gente de Benetton que se unen una vez más para seguir atacándolos, e impedir el desarrollo de la justicia en una causa que tiene a los policías como imputados”, describió la abogada Ivanoff. El 10 y el 11 de enero la represión dejó dos heridos de gravedad, y el operativo incluyó la persecución a los tiros de un grupo que había ido a apoyarlos.
La vocera de la comunidad, Soraya Maicoño, explicó que el lunes en la audiencia en la cual Benetton es querellante por usurpación, van a demostrar con planos y testimonios de antiguos pobladores que el lugar que se recuperó el 13 de marzo de 2015 es tierra que fue entregada a la Colonia Aborigen Pastoril Cushamen, el Estado argentino al lonko Ñancuche Nahuelquir. Entre los imputados está el lonko Facundo Jones Huala, a quien no dejarán participar porque está detenido en Esquel, a la espera que la Corte Suprema defina su extradición a Chile. “Nos estábamos preparando para hacer la convocatoria en este juicio, llevamos fotos y planos que muestran que esa parte no estaba alambrada y el que la usurpó es Benetton, pero pasa esto, es tan impune que entra con su propia policía a disparar otra vez a mujeres y niños, otra vez incendiar, meterse en nuestro territorio”, indicó Maicoño. “Nuestra gente reconoce que junto a la policía vino gente de la estancia, porque se conocen, son de la zona y los pueden identificar”, agregó. “Como pueblos originarios estamos viviendo situaciones de mucha tensión, también los hermanos wichi, avasallan nuestros derechos con incendios y asesinatos”, dijo Maicoño.
El 1 de febrero, cuando se cumplían seis meses de la desaparición de Maldonado, unos cien policías habían irrumpido con una orden del fiscal Carlos Díaz Mayer a partir de la denuncia de Tierras del Sud, de Benetton, por el supuesto robo de ganado. Durante casi seis horas mantuvieron a tres mapuches en el piso con las manos precintadas, y con la ruta 40 cortada por un operativo que tuvo resultado negativo. “Ahí podíamos controlar quién entraba y salía, en medio de tanto hostigamiento, pero ahora era la vivienda de uno de los lamien, le quemaron todo para generar terror, sus pocas pertenencias, entre ellas libros que prueban que esa tierra es nuestra”, apuntó Maicoño. “Benetton es amigo de Macri, hace negocios con la minería, y esto en medio de juicios cruzados, sin que se haya esclarecido qué pasó con Santiago”, sintetizó.
Según el diario Río Negro, una fuente policial desmintió que la fuerza haya tomado parte en el incendio; la subcomisaría de Leleque admitió que detectaron un “foco ígneo” en la zona. “El conflicto empezó hace varios días, con la policía amedrentando con balaceras junto con gente de la compañía Tierras del Sud, piedras del lado de adentro, balas desde afuera –expresó Federico Vercelli, de la APDH–. El miércoles hubo un cambio de candados, la policía entró y prendió fuego la casilla. Están bien pero piden movilizarse al juzgado de Esquel donde hay siete imputados que tienen que declarar.”