La Justicia denegó ayer la libertad de Lautaro "Lamparita" Funes, sindicado organizador de la banda de los Funes que se disputa el territorio con la familia Camino. La defensa del imputado pidió ayer que se dé la libertad con restricciones porque "es débil" la prueba en su contra sobre la acusación de asociación ilícita y hablaron de "contradicciones" de una testigo del homicidio de Cristian Ferrerya, por el que también está acusado. Pero la fiscal Gisela Paolicelli, quien aseguró que hay prueba nueva y que ninguna desincrimina al imputado.
"Continúa dando órdenes a los que están afuera, siendo buscados", aseguró la fiscal. "Hablan de que la testigo cambió la versión, pero ese mismo día que dijo otra cosa, pidió custodia; y ello es por demás de gráfico", señaló, y apuntó a hechos de amenazas a testigos para desligar a imputados en la causa, como una escucha en la que dicen: "Tenés que hablar con una para que le peinen la causa a Lautaro". Para la fiscal "son claros amedrentamientos".